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'Cross', la entretenidísima serie policial "para padres" de Prime Video

Cross, estrenada en Prime Video, son ocho episodios de suspense policial con el célebre personaje de las novelas de James Patterson.

Cross, de Prime Video | Prime Video

Prime Video refuerza su posición como líder en ese estilo de series detectivescas que se ha venido a llamar "dad shows" o series para padres. Tanto Cross, recién estrenada, como Jack Ryan, Bosch, Reacher y los spin-offs previstos para las dos últimas refrendan la intención de la plataforma de streaming de 1) encontrar una fuente infinita en sagas de novela negra de autores tan establecidos como Tom Clancy, Michael Connelly, Lee Child o -en este caso- James Patterson, y 2) crear un agradable sustituto de los héroes masculinos de los ochenta, bien marcados y definidos (tanto en cuanto a musculatura como en su intención de renovar el género criminal) para agradar a ese público igualmente masculino en busca de la "típica serie de detectives" o la nueva novela de aeropuerto de su autor de cabecera favorito.

Si el nombre Cross les suena, y no por las novelas que empezaron a publicarse a principios de los noventa, es con un motivo justificado: Morgan Freeman se hizo cargo del personaje en dos exitosos thrillers de aquella década, El coleccionista de amantes y La hora de la araña, y después Tyler Perry en la mucho más reciente (y merecidamente olvidada) En la mente del asesino. Aldis Hodge retoma el papel con un carisma casi tan imponente como su físico, adaptándose a la perfección al tipo de heroicidad de las series de Prime Video que les mencionábamos arriba.

Cross es la variedad negra de ese modelo, y como tal adopta ciertas características de las antiguas blaxploitation criminal antaño protagonizado por actores como Pam Grier o Richard Roundtree, ambientando las investigaciones en el nuevo y complicado panorama post "Black Lives Matter". La cita a los movimientos sociales es, en realidad, una excusa casi casual y oportunista que la serie protagonizada por Aldis Hodge (Black Adam, Straight Outta Compton) abandona en cuanto le conviene. Al fin y al cabo, el enfrentamiento del protagonista con un millonario y blanquísimo miembro de la alta sociedad, Ed Ramsey (Ryan Eggold, sustituyendo la bata de médico de la serie New Amsterdam por una de carnicero), ya apareja todo el componente de lucha racial que se espera de un género fundamentado en el duelo intelectual y físico de dos machos alfa.

Todo en Cross, serie ideada por Ben Watkins, es artificioso, inverosímil y caprichoso. Los descubrimientos del supuestamente inteligente Cross se producen solo cuando la serie está preparada para que el detective llegue en el último momento, retrasándose con mucho a los razonamientos del espectador. Pero tanto da: la oscurísima fotografía de la serie, que ciertamente la remite a modelos como David Fincher o Peter Hyams, el sentido del humor que se desprende de los imposibles planes del asesino, y la violencia nada soterrada que transmite (la larguísima tortura a la secuestrada interpretada por Eloise Mumford se prolonga durante capítulos) acaban configurando una serie detectivesca tan descabellada como entretenida que se gana a pulso la etiqueta de "dad show", que en ningún momento utilizamos de manera despectiva.

El barniz racial que permite la etnia de los protagonistas permite crear nuevos ambientes entre degradados y acogedores, así como contrastarlo con los del ambiente político de Washington D.C. Un nuevo sabor en esa uniforme y, digámoslo ya, muy sólida aportación de Prime Video a las series policiales de la era del streaming. Aldis Hodge demuestra ser una estrella capaz de acometer un personaje semi-mítico como Alex Cross, tanto en su faceta más familiar como en la dramática, y por supuesto, en la de héroe de acción. Su presencia garantiza serie para muchos años, incluso en aquellos momentos cuando el guion no acompañe.

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