Y aquí me encuentro, defendiendo -más o menos- La que se avecina, serie producida por José Luis Moreno y que encarna todo aquello que al intento de gafapasta que hay en mí le gusta evitar. Sin embargo, sólo hay que sentarse a verla para apreciar, observar, o al menos reconocer, todo aquello que ha seducido a la amplia audiencia que se sienta a verla semana sí, semana también.
Los chistes constantes, personajes locos y situaciones imposibles no nos resultan, en el fondo, tan extraños como quisiéramos, y reflejan estereotipos muy nuestros. Y eso no tiene nada de malo.
Lo que sí es malo, y mucho, son algunos de los defectos de la serie emitida por Telecinco, algunos de ellos evitables y otros no tanto. Pero de todo ello hablamos en el videoblog.