Sidecars lleva diez años haciendo música, desde su nacimiento en el madrileño barrio de la Alameda de Osuna hasta que decidieron juntarse con amigos para grabar, en un directo muy especial, su último disco. Resumir una década de trayectoria en un disco no es tarea fácil, pero Juancho (voz, guitarra solista), Gerbas (bajo) y Ruly (batería) lo hacen sumando temas del pasado con otros inéditos y el resultado es un "golpe de suerte" llamado Contra las cuerdas. Se trata del cuarto álbum de la banda y el más cercano, en el que han participado M Clan, Dani Martín o Iván Ferreiro, pero ni es un recopilatorio normal ni un simple disco de colaboraciones.
En plena vorágine de entrevistas, conciertos y carretera hablamos con Juancho. Adelanto para fans: no tienen ninguna intención de parar.
P: ¿Estáis donde queríais estar cuando empezasteis en la música?
R: No podíamos pensar que esto fuera a pasar. Y más, cuando sacas tu primer disco, has visto muchas películas y te crees que las cosas funcionan de otra manera. Con los años ves cómo funciona todo en realidad, te das cuenta de que es difícil y pensar que podíamos llegar al punto en el que estamos ahora mismo, que es grabar este disco, era inimaginable.
P: ¿Cómo ha evolucionado Sidecars desde el primer disco?
R: Muy despacito, somos un grupo muy trabajador. Llevamos diez años picando piedra, haciendo giras y visitando muchas ciudades a base de perder dinero año tras año, pero sentíamos que era la manera. Así hemos ido sumando público con el primer, segundo y tercer disco. Paso a paso. Sacamos Contra las cuerdas y todo se ha multiplicado por dos. Ha sido el salto más grande que hemos dado en nuestra carrera, pero sentimos que si hubiera ocurrido al principio, habría sido mucho peor. De alguna manera es como si estuviéramos recogiendo lo que hemos sembrado después de tanto tiempo. Hemos hecho un disco y por fin hemos enganchado un pequeño golpe de suerte.
P: De llenar salas míticas de la capital disteis el gran salto a La Riviera. ¿Qué se siente cuando se alcanza algo así?
R: Es difícil de explicar, pasó volando para mí. Fue un mes de muchos nervios, de no dormir y luego llegó el día y no me enteré. (Risas). Lo disfruté todo lo que pude. Fue como una celebración conjunta, nuestra y de la gente. Todos fuimos conscientes de lo que estaba pasando pero no sólo a este lado del escenario. El público estaba muy receptivo y la mayoría nos llevaban viendo muchos años, en otras salas más pequeñas y había mucha complicidad. Por eso sabíamos que estábamos viviendo algo muy especial.
P: Habéis tocado con M Clan y Dani Martín en la Gira Cómplices de Mahou, que además colaboran en el último disco (entre otros). ¿Se siente como tocar en familia?
R: Absolutamente. Nos hemos hecho muy amigos de ellos con el paso de los años, de encontrarnos en giras e ir coincidiendo y era una manera de celebrarlo. El momento en que nos sentamos a grabar este disco en directo queríamos juntar a toda la familia y amigos. Realmente juntamos al 1%, porque tampoco queríamos que fuera un disco de colaboraciones, así que nos quedamos con lo más cercano y con sólo unos poquitos de todos los que nos hubiese gustado.
P: La gira incluye conciertos en formato acústico y eléctrico. ¿Con cuál os sentís más cómodos a la hora de tocar?
R: El eléctrico es lo que hemos hecho toda la vida, estamos más acostumbrados. El acústico requiere un poco más de concentración, pero disfruto tanto con las dos cosas... Es tan divertido poder jugar a tocar en los dos formatos que no me quedo con nada, me quedo con el "doblete".
P: ¿El boom de festivales que ha experimentado España en los últimos años es una burbuja que terminará estallando?
R: Me gustaría que no. Que haya tantos festivales, se promueva la música y se ponga de moda que la gente vaya a escuchar conciertos, me parece bien. Lo que sí creo que pasará es que, de manera cíclica y natural, cambiarán los estilos de los festivales. Hace siete años todos los grupos iban a los mismos festivales y ahora parece que la cosa empieza a cambiar.
P: En estos festivales, a algunos músicos les gusta recordar la importancia de acudir también a las salas...
R: Creo que esto no tiene tanto que ver con la cantidad de veces que toque un grupo en un festival. Es decir, me parece un pensamiento lógico que una persona diga "no voy a pagar 20 euros por ver a este grupo si sé que cada tres semanas toca en un festival con otros 20 grupos que me gustan". Se trata de hasta qué punto pagas por ver a una banda. A nosotros nos costó mucho entrar en los festivales y nunca hemos "perdido el culo" por entrar, pero sí que sentíamos que estábamos un poco de lado, que nuestro estilo de música no lo querían. De todo lo que nos quejamos y la rabia que nos daba no entrar hace dos años, ahora sentimos que es bueno porque la gente sabe que si quiere ver a Sidecars, tiene que venir a un concierto. No hemos tenido el problema de ir a las salas y que no funcione, pero sí que lo hemos visto en amigos nuestros. Es más un problema de programación que de cantidad. Hace falta más variedad.
P: Entonces, ¿es mejor un concierto en un festival o en una sala?
R: Me quedo con las salas sin pensarlo ni un minuto. Los festivales te aportan cosas muy buenas, te juntas con tus amigos y suelen ser noches muy divertidas. Tienes acceso a que te escuche mucha más gente u otra a la que quizás no habrías llegado de otra manera. Pero es cierto que probar el sonido es más difícil, todo es más rápido, está empezando un concierto mientras empieza otro... A nivel de calidad musical, nada como irte a ver un show de un grupo en una sala, es indiscutible.
P: ¿Es fácil dedicarse a la música en España?
R: No, es muy jodido. Llevamos 10 años y se podría decir que hemos empezado a vivir de esto hace unos meses. Y digo vivir siendo muy majo, porque en realidad es sobrevivir. Tienes que tocar mucho en directo y vender muchos tickets para que te dé para pagar sueldos de músicos, road managers... todo para poder volver a casa y haber ganado dinero. Esto sumado al IVA que es muy fuerte... al final es muy elitista. A nivel gubernamental y cultural no se pone fácil, se sigue entendiendo que la música no es una prioridad ni una parte importante de la cultura para los jóvenes y es algo que hay que fomentar.
P: Viendo el panorama, ¿animarías a alguien cuyo sueño es dedicarse a esto que luchara por ello?
R: Yo le diría que adelante. Nuestro ejemplo es que con constancia, trabajo y paciencia hacen que al final lleguen resultados. Sé que también hace falta que te pille un pequeño golpe de suerte y otras cosas, pero ese golpe de suerte te tiene que pillar currando, con unas tablas y con un currículum detrás. Yo animaría a hacerlo porque, si te sale, te vas a dedicar a lo que te gusta y creo que eso es la definición de éxito.
P: ¿Echas en falta que las televisiones apuesten por incluir espacios musicales en su programación?
R: Es vital y no lo digo desde el punto de vista del músico, que también. Los niños ven la tele y sólo ven basura y de vez en cuando no está mal que pongan algo de música en directo. Ves televisiones extranjeras y tienen unos programas musicales que "te caes de culo" y todos los grupos del momento van a tocar porque entienden eso. Si aquí hubiera un programa de música bueno, iríamos todos porque querríamos estar ahí para apoyarlo. Es muy importante por ese lado y por el nuestro como músicos. Tuvimos una campaña con El Corte Inglés que duró una semana en televisión y a día de hoy sigue siendo nuestra canción más conocida (Fan de ti), la pregunta que nos hacen siempre y sólo estuvo una semana. Es impresionante, luego te tiras con una canción en la radio ocho meses y no pasa nada. La televisión tiene tanto poder que asusta y estaría bien emplearla para cosas útiles.
P: El streaming es el formato en el que más música se consume, pero las ventas de vinilo se han disparado. ¿Es una moda o el vinilo ha vuelto para quedarse?
R: Ojalá. (Risas). Yo soy un romántico y me encantaría que así fuera, pero no. Esto es como los cascos de colores y como las Nike de los 80. Hay un punto en el que a los músicos nos hace ilusión tener un vinilo, no es sólo para la gente. Antes hacías 200 copias para tener tú una y las otras para ver si alguien las quería comprar, y ahora se hacen muchas más, pero supongo que es algo que bajará.
P: ¿Qué planeáis hacer cuando termine la gira?
R: No hay planes de terminarla, por ahora. Tenemos muchas ganas de enseñarle a la gente lo nuevo, meternos a grabar y renovar el repertorio, pero a la vez sentimos que no queremos robarle tiempo de vida a este disco porque nos está trayendo muchas cosas buenas. Vamos a trabajar en el disco en paralelo a la gira. No vamos a dar fechas ni a hacer grandes anuncios de momento, pero ya estamos preparando repertorio. No tenemos ninguna intención de parar ni de respirar, pero en cuanto lo tengamos, lo disparamos.