En la mayoría de los videoclips musicales se lanzan mensajes violentos, sexistas y vejatorios, según afirma una tesis doctoral titulada Industrias culturales y juventud en el sistema mundo defendida en la Universidad de Alicante. Este trabajo sostiene que en los videoclip predominan contravalores como la agresividad, la violencia, la hipersexualización de las relaciones, la cosificación del ser humano, el culto a la riqueza material o un vocabulario ofensivo.
Para sacar estas conclusiones, se analizó el contenido de 400 vídeos musicales de entre 2007 y 2012, incluidos los más vistos en YouTube y los galardonados por los premios MTV y Grammy.
El estudio advierte que son justamente los jóvenes los mayores consumidores de este producto que es, a su entender, un muestrario de valores negativos.
Algunos ejemplos
"Puedo moverme como quieras (...) necesitaré unas cuatro o cinco camas", dice Jennifer López.
Según esta tesis, Rihanna presenta una escenografía hipersexualizada con algunas escenas de toque pornográfico.