Rodríguez Braun
se dejó de nuevo entrevistar por quien esto escribe; a cuenta, esta vez, de su Economía de los no economistas, donde vuelve a hacer alarde de erudición, pedagogía y buen humor. Un must read prologado por Pedro Schwartz, otro que tal baila, y del que en breve podremos leer un nuevo libro con toda la tela: La economía explicada a Zapatero y a sus sucesores.
El audio de la entrevista, aquí. Y aquí, el del programa completo, con el muy recomendable momento de la reseña que Gago y Montaner dedican a lo último que nos ha llegado de su idolatrado Roberto Bolaño.
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Murió Sabato ("Yo oscilo entre la vacilación y la esperanza") y qué manía le tenían Borges y Bioy:
Bioy: "Sabato también desaparecerá, sin dejar rastro, después de la muerte. Es curioso el caso de Sabato: ha escrito poco, pero ese poco es tan vulgar que nos abruma como una obra copiosa". Borges: "Nunca le tuve afecto".
(Adolfo Bioy Casares, Borges, Backlist, p. 61; entrada del 10 AGO 56).
Esto está tomado de la entrada "Borges" del Uno y el universo que hace tanto compuso el que igual recién ahora está descansando en paz:
A usted, Borges, lo veo ante todo como un Gran Poeta. Y luego así: arbitrario, genial, tierno, relojero, débil, grande, triunfante, arriesgado, temeroso, fracasado, magnífico, infeliz, limitado, infantil e inmortal.
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Lecturas: Después de tantos años El túnel; de nuevo incursiones en Del amanecer a la decadencia (Barzun) y la Nueva historia de España de Moa ("La expulsión de los judíos y la Inquisición", "Erasmo, Vives, Lutero e Ignacio de Loyola", "De Carlos I a Felipe II", "El Concilio de Trento y la Escuela de Salamanca", "De Filipinas a Flandes y Lepanto", "Un balance del siglo XVI"); catas en El catolicismo español de Payne y la historia de España de Domínguez Ortiz. Igual El puercoespín de Barnes.
Pues a lo mejor Bioy tenía razón porque yo leí "El Túnel" hace años y no recuerdo absolutamente nada. Creo que podría leerlo de nuevo como si lo hiciera por primera vez. Tal vez sea por ser tan insustancial como dicen sus críticos o porque se me está secando la corteza, que todo puede ser.