Izas, rabizas y... doctores tiene la Iglesia
Chafuen, a quien entrevistaremos en breve, en sus Raíces cristianas de la economía de libre mercado:
En lo que respecta al acto de recibir salarios como recompensa por acciones inmorales, los escolásticos condenaron la acción inmoral en sí y no la recompensa. Las prostitutas pecaban por violar el sexto mandamiento, pero no por cobrar por sus servicios.
(...)
Hoy en día es frecuente escuchar a moralistas que señalan que el hecho de que gente con pocos escrúpulos morales obtenga salarios más altos que aquellas que se dedican a labores más nobles es una afrenta a la justicia distributiva. Sin embargo, los autores escolásticos tardíos, al analizar los ingresos de las meretrices, no sólo los incluyeron como tema de justicia conmutativa, sino también llegaron a la conclusión de que los actos pecaminosos pueden ponerse a la venta y de que aquel que los realizó puede incluso recurrir a la justicia para cobrar lo que se le adeude:
"Mas los pecados, aunque por razón de la culpabilidad no sólo son despreciables e indignos de todo precio, más aún, deben ser por lo mismo aborrecidos y execrados, sin embargo, por razón del consentimiento de aquel que pone en alquiler sus actos y por razón del placer de aquel que los contrate, por cuanto son aplicables a sus humanos, pueden ser conseguidos con recompensa y con dinero. Por lo cual una mujer que hace entrega del uso de su cuerpo, puede recibir salario a causa del placer que el hombre disfruta con ello".
Unas líneas más adelante, [Domingo] de Soto señala que el que no le pagase a la meretriz el precio determinado "podía ser obligado por el fuero judicial".
Esta actitud de los escolásticos tardíos para con este tema tan delicado demuestra su amplitud de criterios. Sabían analizar lógicamente un problema sin dejarse llevar por sus deseos o sentimientos. Aborrecían el pecado, pero esto no modificaba sus conclusiones acerca de la justicia en los contratos salariales.
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Norberg y el trabajo infantil
Hoy en día [2002] existen en el mundo unos 250 millones de niños trabajadores de entre 5 y 14 años. Es indignante que se prive a millones de pequeños de su infancia y, a menudo, también de su salud y alegría, pero ¿verdaderamente ayudamos a estos niños cuando la Unión Europea se niega a entablar lazos comerciales con los países donde viven? En absoluto. Nos damos cuenta de lo absurdo de este planteamiento al comprobar que la gran mayoría de los menores trabajan en sectores que no tienen nada que ver con el comercio. El 70% de la mano de obra infantil opera en el ámbito de la agricultura. Sólo el 5% (entre 10 y 15 millones) trabaja en la industria de la explotación, fabricando, por ejemplo, balones de fútbol, cosiendo ropa o tejiendo alfombras. Además, según todas las fuentes disponibles, estas labores infantiles orientadas hacia la exportación son las menos nefastas, por ejemplo, en lo relativo a la seguridad del entorno laboral.
(...)
En 1992 se reveló que la cadena estadounidense Wal-Mart había comprado ropa manufacturada por niños. El Congreso norteamericano amenazó entonces con prohibir las importaciones de países donde existiera el trabajo infantil. Esta amenaza desembocó en el inmediato despido de miles de niños activos dentro de la industria textil de Bangladesh. En el seguimiento de esos niños efectuado por varias organizaciones internacionales, se comprobó que muchos de ellos fueron a parar a trabajos más peligrosos y peor remunerados, terminando, en algunos casos, en la prostitución. Según el Fondo de la Infancia de la ONU, un boicot similar contra la industria nepalí de fabricación de alfombras hizo que más de 5.000 muchachas se vieran forzadas a ejercer la prostitución.
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La mitad de los peones infantiles trabajan sólo parte de la jornada, y muchos lo hacen para poder financiar su educación.
(Johan Norberg, En defensa del capitalismo global, pp. 214-216)
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Sala i Martín, que en cuestiones económicas no siempre es un majadero, y lo que soportan los pobres países pobres:
El año pasado [1999], 40 millones de litros de leche se echaron a perder en el norte de Tanzania mientras los supermercados de la capital, Dar es Salaam, solamente vendían leche holandesa. ¿Cómo es posible que sea más barato comprar leche holandesa que leche tanzana en Tanzania? La explicación es bien simple: los productos europeos disfrutan de obscenas subvenciones, lo que les permite competir (deslealmente) con los de los países pobres. Los contribuyentes europeos y americanos pagamos más de mil millones de euros diarios (repito, diarios) en subvenciones y protecciones agrícolas. Con esa extravagante cantidad se podría invitar a cada una de las vacas europeas a pasar un mes de vacaciones en un hotel de cinco estrellas en las Bahamas, con viaje de ida y vuelta en avión de primera clase.
(Xavier Sala i Martín, "La esperanza de África", La Vanguardia, 17-II-2000; reproducido en X. Sala i Martín, Economía liberal para no economistas y no liberales, pp. 173-175)
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Correspondencias
Más razón que un santo
De: Joaquín Gxxxxxxx (jxxxxxxxx@gmail.com)
Para: hojadereclamaciones@esradio.fm
Fecha: 10 de noviembre de 2009, 23:14
Asunto: Punto negativo
Hola:
Me encanta vuestro programa y me lo bajo siempre en podcast pues aquí no llega EsRadio.
Pero os tengo que poner una mala nota: ¿por qué no se citan nunca los traductores de los libros? ¿Acaso los traducen con máquinas o todos los autores extranjeros saben español y escriben en español? Alguno habrá que escriba en su idioma, digo yo.
Cuando en alguna ocasión decís que un libro tiene un estilo brillante, que se lee muy bien, etc., imagino que algo tendrá que ver el traductor, ¿no os parece?
Basta con citar el nombre. Aunque tampoco estaría de más que algún día hicieseis algún programa dedicado a los traductores literarios. Sin ellos no habría cultura ni os podríais deleitar con tantos libros que os gustan.
Un saludo cordial.
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Lecturas: A ver si El periodista y el asesino, de Janet Malcolm.
Claro: si a un niño pobre le prohibo trabajar y prostituirse pero al mismo tiempo no le ayudo, lo estoy condenando a morirse de hambre...hasta ahí llego. O sea, que en los mercados de Tanzania no había escasez de leche...¿dónde está el problema? Yo estoy cansado de ver y oír en los medios de comunicación a pequeños ganaderos españoles (sobre todo gallegos y asturianos) quejándose de que están al borde de la quiebra...a lo mejor el problema está en los intermediarios, que tiran al máximo a la baja los precios a los que compran y al alza los precios a los que venden, y que a nadie se le ocurra defender una limitación de sus benefecios...¡¡¡eso es intervencionismo!!! Por cierto, los liberales, o al menos algunos (por que luego cada uno es de su padre y de su madre, y se acusan unos a otros de no ser auténticos liberales sino cripto-socialistas), defienden las leyes anti-monopolio...¿no son intervencionistas estas leyes? Si el libre juego del mercado deriva en un monopolio ¿quién es el Estado para impedirlo?
Menos mal que me iba a ir...y casi soy el único que estoy.
Según Anti-Marx, de los inmigrantes procedentes de países musulmanes, una minoría son fanáticos religiosos y una mayoría son personas honradas y trabajadoras que, pese a las apariencias, en realidad no son musulmanes, porque como todo el mundo sabe es imposible que en un musulmán sea una persona civilzada y viceversa.
Yo creo que la Globalización es una de las mejores cosas que le ha pasado a la Humanidad en toda su Historia, y que lo mejor está aún por llegar. Oswald, las leyes anti-monopolio quer defienden los liberales son las que tratan de deshacer monopolios creados por el Estado, no los que han surgido de forma espontánea en el mercado. Por ejemplo, sería bien vista una ley para acabar con el monopolio de Telefónica (en su día) y permitir que haya más empresas que presten servicios de telecomunicaciones. Pero son mal vistas las leyes contra Google o Microsoft. Son 2 situaciones opuestas y la distinción entre una y otra es evidente. Por supuesto que no hay que limitar los beneficios de los intermediarios. Lo que hay que hacer es eliminar trabas, burocracia e impuestos para que mucha más gente se pueda meter a intermediario y el mercado regule sus beneficios.
Mario, gracias por la cita de Norberg. Leí el libro (muy recomendable) pero la memoria se ve que no. La cita de Sala i Martín también es muy apropiada. ------------------- Se ve que Oswald, el último 'spengleriano' vivo, ¡y a mucha honra!, es también el último ser humano que se cree que los préstamos (en realidad transferencias a fondo perdido) concedidos a los países donde hay mayor necesidad material llegan en su mayoría a quién los necesita. Pero alma de Dios (perdón, de Spengler) ¿no te has dado cuen todavía que los dictadores y sus burocracias se lo quedan todo o casi todo? ¿O eres de los que les gusta que les roben? Pero Oswald no aprende, le da igual todo en Historia, Economía, Política (como a D. Hoffman en Rain Man) siempre que su solución tenga que ver con ...¡agggh! ¡el abominable libre mercado!. Está claro que tú, Oswald, preferirías controlarlo TODO. No tengo duda de que expropiarías la leche de Tanzania. Incluso que llevarías a los niños al cole de la mano para que cantasen contigo el "Deutschland, Deutschland über alles" Oye, a las voces esas que tú oyes ... las de los pequeños ganaderos al borde de la quiebra: ¿Sabes si alguien les obliga a dedicarse a esa actividad?. ¿Les has auditado tú para saber que están en bancarrota o cabe la posibilidad de que sólo quieran 'pillar algo como los demás', y estén llorando a ver si cuela? Las leyes anti-monopolio por supuesto que son intervencionistas. Lee la "Guía políticamente incorrecta del capitalismo" de R. Murphy, te sentará bien:"13. Confiando a los federales el antimonopolio. Los "Robber Barons" (¡conspiradores sionistas!) bajaron precios y costos. Las fusiones en el libre mercado aumentan la productividad y la eficiencia, los monopolios gubernamentales no. Las demandas "antimonopolio" siempre vienen de empresas perdedoras en el mercado." http://ecuadorlibertad.blogspot.com/2009/05/guia-politicamente-incorrecta-del.html (Cont.)
USV (Último Spengleriano Vivo)#3 Los musulmanes claro que son civilizados, siempre que tus compañeros de Scattergories acepten Islam como civilización a día de hoy. Yo lo acepto si prometes no irte del blog (¡porfiiiiiis!). -------------- ¿Saben algo? Me estoy cansando de jugar a la defensa y contraataquel como si fuera el 'Atleti' y USV fuese el Barcelona. Vamos a cambiar un poquito de papel, que me aburro de repetir lo que todos menos uno ya han leído. Ya que esto es un blog sobre libros y sus autores, propongo hablar de ... ¡Dadme una 'S'! ¡Dadme una 'P'! ¡Dadme una 'E'! ... Dicen las malas wiki-lenguas que el tocayo y admirado de Oswald, en su nada recomendable obra "La decadencia de occidente" alegaba: "... que el desarrollo de las civilizaciones sigue un modelo cíclico reconocible según tres tipos de sociedad que se irían sucediendo en el tiempo hasta llegar a una cuarta final de decadencia: la Apolínea [Pfffffs] o Clásica; la Mágica [Juaaaaaaa], propia del mundo islámico [Doble Juaaaaa], la Fáustica u Occidental, y la de Decadencia." Oye USV, pero la 'Mágica', si es tal, ¿no debería reaparecerse al final (como por arte de m...)? ¿O es que 'Magic Spengler' http://www.dirac.es/sei/JUEGO/libros/andreu.jpg era un pelín ilusionista? No sigo, qmmeotó y los 501 del Feisbuk están recién estrenados. Para la siguiente de USV (que ya se iba, pero que no puede evitahhhhlo y vuelve) tengo un 'truco de magia' aún mejor.
Vlad Capitalácula se retira a su ataúd de oro con forro de dólares (esto último por si hay que hablar con Roca y no queda papel ...) para descansar un poco antes de salir a extraer hasta el último marco de los pobres alema... digo céntimo de euro de los pobres españoles (el personaje sería perfecto para un político, pero lo de la operativa noctunna, como que no lo veo. Si fuera ocio ...). Y no se preocupen, volverán a leer a Van Oswalding y sus ajos totalitarios (es como el Moreno y sus muñecos, nunca se terminan de ir). Buenas y spenglerianas noches a todos. ¡Ñieeeeec!
Sois la mar de salaos. Y los sosos del Feisbuc quejándose de que el blog está plomizo...
Todo lo que hace el Estado es malo, todo lo que hace el mercado es bueno, por eso los monopolios son malos si los crea el Estado pero son buenos si los crea el mercado...¡toma ya! Las ayudas al tercer mundo no llegan a los necesitados sino a gobiernos corruptos...la reacción de una persona sensata ante esto sería: "intentemos que la ayuda llegue a los pobres", la reacción del "liberal" es "dejemos de ayudarles". Diga lo que diga uno, la respuesta siempre es la misma "Es-ta-do ma-lo, mer-ca-do bue-no" (dígase con acento robótico). Eso es lo característico del sectarismo y el fanatismo: pretender explicar toda la inmensa complejidad de la vida real con un único principio muy sencillito y muy cómodo. Para despedirme (ahora sí que sí) les cuento que hará unos pocos meses, en el telediario de D. Brandau, Recarte y Carmen Tomás, en respuesta a la pregunta de un espectador, reconocieron que si la intervención del Estado en la economía es moderada y razonable no es perjudicial...Recarte y Tomás, otros dos socialistones. Adios, señores, y sean felices con su dogmita.
Oswald: No tengo ánimo ni tiempo para meterme en este fregado, máxime si te vas para no volver (cosa que lamento sinceramente yo también), pero me parece que en tu despedida has patinado un poco. La literatura de los economistas liberales no es precisamente un ejercicio de sectarismo ni de fanatismo, sino un intento desapasionado por esclarecer las oscuridades del mundo aplicando la razón, teniendo en cuenta la naturaleza humana. Las consignas ciegas como respuesta al cuestionamiento de una concepción del mundo son más propias de otras posiciones. En cuanto a Recarte y Tomás, a la segunda no la conozco demasiado bien (a pesar de que la he oído hablar muchas veces) pero Recarte ya ha dicho en alguna ocasión que él es reacio a autodenominarse "liberal". Hombre, comparado con Marx, sí lo es, pero comparado con Soto, Rallo o Rodríguez Braun, es más bien "mediopensionista". Digamos que no es "liberal pata negra" –por utilizar tu expresión–, ni ancap, ni minarquista. Tú mismo has dicho que los liberales son cada uno de su padre y de su madre. Por otro lado, habría que ver qué grado de intervencionismo considerarían Recarte y Tomás tolerable, o razonable. Y... lo siento, no puedo resistirme. Antes de irme a cenar, tengo que contestar. La reacción del liberal en lo referente a las "ayudas" al Tercer Mundo no es "dejemos de ayudarles", sino "dejemos de apoyar financieramente a estos gobiernos despóticos y burócratas corruptos y chupasangres que los tienen viviendo en la miseria", "dejemos de apoyar medidas contraproducentes", "abramos los mercados, quitemos aranceles y subvenciones y trabas administrativas y demás obstáculos para que estas gentes puedan vender sus mercancías en igualdad de condiciones en lugar de limpiar nuestras conciencias de modo hipócrita haciendo como que les ayudamos, pero en realidad dándoles por culo".
Aunque las ayudas llegaran a los que de verdad lo necesitan, las cosas no funcionan así. Las subvenciones generan dependencia, perpetúan la pobreza y restan dignidad. Que sean pobres no significa que sean unos vagos, como lo han demostrado todos los países que ahora son prósperos, y que antes eran pobres (recuerda que la pobreza es el estado originario, y que la riqueza no cayó del cielo). Lo único que necesitan es que el mercado llegue hasta ellos, o que ellos puedan acceder al mercado, que se respete su propiedad, los contratos, que no los acosen los burócratas corruptos deseosos de sacar tajada (uno de los mayores males de esos países es el vampirismo practicado contra los emprendedores que tienen algo de éxito). En fin, me imagino que ya te sabes la cartilla... Y... vaya, al final me he metido donde no quería meterme, para no desequilibrar el combate. Un saludo, Oswald.
Erbilyos, gracias por contestar a Rain Man sobre la reacción del liberal en lo referente a las ayudas al Tercer Mundo (#10 y#11). Muy bien expresado (sobre todo el lenguaje técnico al final del post #10). Pero no des por sentado que USV se sepa la cartilla, porque no quiere saberla, de alguna forma ha asimilado un programa y no es capaz de sustituirlo por otro, a pesar de la evidencia. Yo había desistido de responderle hace un año, pero he vuelto a caer en la tentación. En cuanto al grado de intervencionismo que consideraría tolerable Recarte, tienes una pequeña muestra en el "Informe Recarte" sobre la crisis (a mí personalmente me gustó más "Una crisis y cinco errores", de Rallo y R. Braun; pero ambos libros son interesantes y se complementan en algunos temas. En otros difieren, curioso comportamiento dentro de una presunta 'secta'). Y estoy de acuerdo en que Recarte ni es miniarquista ni mucho menos ancap. (Pero tampoco "socialistón", USV. Eso lo serán en todo caso el faraón Cobardón y su perrito de caza Cobordón). ¿Que los del Feisbuk se quejan del blog? Pues crítica constructiva, queridos. Pasen por aquí y participen, como Erbilyos lo ha hecho (ésta es mi pelota que bota, bota y rebota). Finalmente, Erbilyos, también te agradezco que me incluyas en el mismo saco que a USV (el de los 'salaos') ;) ¿Alguien se cree a estas alturas las despedidas de Oswald? No puede vivir sin LD. Un abrazo para todos y, si vuelve el hijo pródigo, perdón, cuando vuelva prometo otro episodio de ¡Hablemos de exo...(Spengler)! para celebrarlo.
Una de las razones por las que acabé identificádome con el liberalismo (entendido en un sentido amplio, no en el sentido ancap), y defendiendo sus principios y sus posiciones, es que veía que los socialistas, estatistas, progres –y demás fauna antiliberal– no eran capaces de rebatir convincentemente las tesis y argumentos de los liberales. También es cierto que hay una inclinación natural a la libertad por mi parte, pero creo que lo definitivo fue ver que el debate se lo llevaban los liberales de calle. Si esas posturas no tienen más simpatizantes, es por falta de conocimiento, pereza intelectual, prejuicios cognitivos e incapacidad para el pensamiento analítico, sosegado y puramente racional. Todos los que critican el socialismo conocen a Marx y sus teorías (más o menos), pero pocos de los que se oponen al liberalismo conocen a los teóricos liberales. El debate me recuerda cada vez más a las posturas del pensamiento científico frente a la superstición. Creo que, básicamente, el antiliberalismo es oscurantismo. Y digo "básicamente" porque, por desgracia –y aquí entra en juego mi faceta realista–, el mundo es muy imperfecto y presenta dilemas y paradojas de difícil resolución a veces, de modo que el liberalismo no es una panacea. Hay amenazas, peligros, que te pueden llevar a plantearte si es buena idea seguir tus principios a rajatabla, siempre y en toda ocasión. Algunos de esos dilemas no los tengo resueltos, personalmente.
AntiMarx, tenía razón Oswald en una cosa: lo que dices sobre los inmigrantes musulmanes es contradictorio. Eso no está bien resuelto en tu mente. Tienes que aclararte. O bien los musulmanes son un peligro para la continuidad de Europa y de nuestra cultura, libertad e instituciones –por incompatibilidad–, y entonces algo habrá que hacer al respecto, o no son un peligro y entonces los seguimos recibiendo con los brazos abiertos esperando que la competencia cultural y la obvia superioridad de nuestra civilización obren el milagro de que el Islam se disuelva en Europa como un azucarillo en una taza de café caliente. Este es un tema que seguirá dando que hablar en las próximas décadas, a medida que la comunidad musulmana vaya creciendo y representando un porcentaje mayor de la población. No sé qué pensarán de todo esto los númenes de LD Libros, nuestros anfitriones –que parecen estar mucho más entretenidos con la tropa feisbuquera–, pero esto parece que se ha convertido en un foro de discusión política. Tal vez estamos pervirtiendo el blog. En ese caso, pido disculpas. Buen fin de semana a todos.
Creo que es de interés para todos: www.mueranlascaenas.com CAMISETAS LIBERALES ¿TE ATREVES?
Querid@s Carmen, Víctor y Mario: Mil gracias por vuestro envío de libros que acabamos de recibir por y con sorpresa, la parienta y yo mismo. Muy interesante el libro "¿Qué es la vida?" de Ed Regis que espero devorarme a la mayor brevedad, así como la novela de Newman que hará las delicias de la parienta y de otra señora de ochenta y tantos que siente auténtica devoción por el personaje. Debe ser la primera cosa que "me toca" en mi vida, así que doblemente agradecido. Y lo más importante: continuar con vuestro estupendo programa que es de los pocos que merecen la pena escuchar, aunque sea enlatado... :-(. Por cierto, no sé si os he comentado mi indignación y la de otros muchos oyentes, por colocar vuestro programa en horas tan "estupendas" como los sábados a las cuatro y media de la tarde.... Un besote y dos abrazotes a repartir.
Hace unos minutos he recordado aquellas estampas que evocaba mi madre, cuando, antaño, la familia entera se agrupaba en torno a aquellas radios que les acercaban noticias de guerras, folletines románticos, consultorios sentimentales, grupos folklóricos, la vida en fin. Esta tarde hemos rememorado en casa aquellos tiempos. Nos hemos arrimado a la radio para escuchar, atónitos al principio y, poco a poco, más y más emocionados, la hermosísima y entrañable bienvenida a este mundo que Don Víctor Gago daba a nuestra nueva hija. Carolina, en sus apenas siete días de vida, ha tenido la suerte de recibir la más acertada y tierna guía para deambular por el páramo que le aguarda. Sus padres también han tenido la suerte de recibir el sabio consejo de quienes practican aquello que han aconsejado a nuestra hija: el amor a los libros. Siguiendo tu acertado consejo, Víctor, trataremos de enseñarle a ejercitarse en el placer y en el deber de la lectura y a edificarse un espíritu crítico –que casi es tanto como decir sabio- que le prevenga frente a quienes quieren esclavizarla en sus instintos. A Carolina le han regalado ropita, sonrisas, pañales, juguetes… pero nadie había tenido antes el acierto de regalarle una propuesta de infancia, una delicada pauta de vida. Estos tres amigos que nos acercan a la radio en la tarde de los sábados han tenido el detalle de entregarnos uno de los más hermosos regalos: un poquito de su sabiduría. Y es que “…la luz deja paso a la noche, pero a la sabiduría no la domina el mal.” Sinceramente emocionados y agradecidos, los padres de Carolina.