Los exitosos escritores Stephen King y George R. R. Martin participaron en un foro abierto en Albuquerque en el que debatieron sobre el control de armas en Estados Unidos. Este tema no estaba incluido en los puntos del día, sin embargo salió a colación cuando el creador de Juego de Tronos preguntó a King sobre su novela End of watch, en la que cuenta la historia del asesino en serie Brady Hartsfield. En un momento dado, salió el tema de la restricción de armas acerca de la matanza en el bar Pulse en Orlando.
"Muchos de estos tipos son unos don nadies que quieren llegar al estrellato cometiendo actos masivos de terror. Y, claro, lo triste de esto es que se recuerda más a los asesinos que a las víctimas, lo cual lo convierte en un acto de autoperpetuación", aseguró el autor.
R.R. Martin consideró que si el asesino hubiera estado armado sólo con un cuchillo, el número de víctimas hubiera sido considerablemente más bajo. "Mientras cualquiera que sólo tenga dos dedos de frente pueda entrar en una tienda a comprar… una máquina de matar como el AR-15, esto va a seguir pasando. Realmente depende de nosotros", añadió King.
No es la primera vez que el autor de El resplandor se ha mostrado a favor de una rigurosa política de control de armas. Lo hizo en 2013 en un ensayo denominado Guns que escribió tras el asesinato con armas de 20 niños y 6 adultos en la escuela primaria Sandy Hook. Pedía la prohibición de armas automáticas y semiautomáticas. "Cuando los locos quieren hacer una guerra a los que se encuentra desarmados y sin protección, éstas son las armas que utilizan", escribió.
Asimismo, los dos autores discutieron sobre la naturaleza del mal en la ficción. Martin comentó que en las obras de JRR Tolkien "el mal está externalizado", pero en la escritura de Stephen King "los verdaderos villanos son las personas". Por su parte, George RR Martin dijo que siempre se había sentido más atraído por los personajes grises: "Creo que la batalla entre el bien y el mal es un gran tema para la ficción, pero en mi opinión la batalla se libra dentro del corazón humano. Todos somos parcialmente buenos y parcialmente malos".