Solo el tres por ciento de escritores no anglosajones publican en Estados Unidos. El gallego Manel Loureiro es uno de ellos. No sólo se ha colado en uno de los mercados más difíciles, sino que ha colocado sus libros en las listas de más vendidos. Lo hizo hace años de la mano de unos curiosos padrinos: los no vivos, muertos vivientes, caminantes con sed de cerebros o, dicho de otra manera, de los protagonistas de su primera novela Apocalipsis Z. El principio del fin, recomendada, incluso, por los guionistas de la serie Walking Dead; y lo repitió con El último pasajero (2013). Ahora regresa con su sexto libro: Fulgor (Planeta, 2015).
La vida de Casandra es bastante normal hasta el día en que sufre un extraño accidente de tráfico que la deja en coma. Tras bastantes semanas y una recuperación descrita como milagrosa, Casandra descubre que todo su mundo ha cambiado por completo: alguien ha empezado a acechar su casa y sufre una secuela inquietante que no puede controlar.
"El problema de esa secuela es que no se lo puede contar a nadie porque nadie la creería", cuenta el autor a Libertad Digital. "Una serie de personas desconocidas empiezan a rondar su casa y a su familia en busca de algo que Casandra desconoce pero que ellos están convencidos de que sabe lo que es y que lo tiene. Esto es Fulgor".
La novela cuestiona las líneas que las personas se trazan y las circunstancias que nos obligan a traspasarlas: "Esas líneas rojas se vuelven tremendamente flexibles cuando se pone en juego algo que realmente valoramos, como nuestra propia vida o la de nuestros seres queridos. Se desdibujan y se vuelven muy laxas. Yo estaría dispuesto a cruzar líneas que ni siquiera sé dónde están por salvar a los míos", admite este autor de Pontevedra.
Fulgor presenta a unos personajes oscuros que, como en la vida real, andan entre nosotros cargados de energía negativa. "Son vampiros emocionales, que te chupan la vida, la energía en el trabajo, son cenizos y te cargan de negatividad", explica. "Me he encontrado con unos cuantos en mi carrera – bromea-, afortunadamente, me he cruzado con más personas con buena energía y seres de luz".
Manel Loureiro aparcó su carrera de abogado para dedicarse en exclusiva a "contar historias". Su vida cambió por completo cuando los guionistas de Walking Dead propusieron en las redes sociales a sus seguidores que echaran un vistazo "al libro de aquel tipo de apellido impronunciable". "Fue el elemento diferencial. Entrar en el mercado americano es terriblemente difícil y llegar a tener éxito es complicadísimo. Me puso en órbita y a la vista de todo el mundo", admite.
El escritor gallego es uno de los referentes de la novela negra española, que empieza a levantar el vuelo y a plantar cara a la nórdica, de gran tradición. "La novela negra en España goza de una vitalidad extraordinaria y la muestra es la cantidad de festivales de este género que se celebran en nuestro país. Tiene una energía y una fuerza envidiable. El producto que se hace en España está muy reconocido en el mundo", considera Loureiro.
En su caso, le debe mucho, según admite, a sus orígenes. "Si yo no hubiera nacido donde nací y viviera donde vivo, seguramente no escribiría como escribo. Cuando yo tenía seis años, mi abuela me contaba historias de la Santa Compaña y de trasgos, del folclore gallego. Crecer rodeado de bosques también conforma mi manera de ser". Y por supuesto, de sus influencias. Disfruta de las lecturas de Stephen King, con quien le comparan - "es abrumador, agradezco la comparación pero me queda grande, indica que lo que estoy haciendo va por buen camino porque se parece a algo que a la gente le gusta desde hace tiempo"- Colleen McCullough (El pájaro espino), o Javier Sierra (El maestro del Prado, La pirámide inmortal).
Fulgor es una novela de intriga, acción y terror, aliñada con componentes sobrenaturales y una descripción exquisita de las escenas más turbulentas que engancha al lector en cada página. Su personaje principal, Casandra, sufre una evolución drástica, perfectamente diseñada, que resulta muy atractiva y a la vez natural. "Construir un personaje femenino creíble siendo un hombre es muy difícil porque, aunque las respuestas racionales, es decir, las que dependen del intelecto, son iguales entre hombres y mujeres, las respuestas que dependen de las emociones y sentimientos son distintas. Por eso, crear a un personaje creíble, que no actúe de manera extraña, como escritor es un desafío. Además, me interesaba un personaje femenino porque son mucho más poliédricos, con más facetas y aristas, más complejas y complicadas".
Además, Fulgor llega con una iniciativa pionera: el bundling. Gracias a este formato, el lector que compre la versión en papel puede acceder también a su edición digital a través de una aplicación para móviles o tabletas. La lectura se realiza en streaming, sin necesidad de descargar el archivo, de forma que el contenido queda protegido contra la piratería.
Manel Loureiro. Fulgor. Editorial Planeta, 2015. 416 páginas. ISBN: 9788408138334. 19,90 euros.