Héloíse Guerrier, coautora del diccionario de expresiones castizas Con dos huevos ha explicado En Casa de Herrero algunas de las expresiones con las que cuenta su obra. Así, ha afirmado que lo que le llevó a escribir este libro fue la sorpresa que le provocaron las expresiones que se emplean en España. "Me hacían mucha gracia y las iba apuntando, de aquí salió la idea de este libro", explicó.
En primer lugar se ha referido a la expresión que da título al texto, "con dos huevos", explicando que "abarcan muchos significados" y que pese a que no ha encontrado un "origen concreto se asocian a los atributos masculinos, a valentía y a valores positivos", a diferencia de expresiones en las que se emplean los atributos femeninos como "es un coñazo" en las que los "valores son negativos". En este sentido, ha aclarado que “el libro no pretende decir que el lenguaje español es machista” sino que “tiene mucha relación con el sexo y la comida".
Héloïse Guerrier también ha explicado el origen de la expresión "me cago en la leche", comentando que hace referencia "a la leche materna" y que en realidad proviene de "me cago en la leche que mamaste", así como "me cago en la mar viene de la virgen María". Respecto al dicho "el coño de la Bernarda", ha señalado que "sale en muchas fuentes" pero que la mayoría la "ubican a Bernarda en Granada" y se trata de "una santera que cuando tocaban su sexo tenían más suerte, buenas cosechas, salud…”. Además, ha comentado que fue “una leyenda que levanto revuelo en la iglesia” y que se dice que “al desenterrarla vieron su sexo era lo único que quedaba intacto”.
En cuanto a "montar un pollo" ha aclarado que "pollo no tiene que ver con el volátil sino con poyo, que viene del pedestal en el que el orador daba un discurso en el que podían salir polémicas…". Al mismo tiempo, la filóloga ha explicado que el origen de "manda huevos" no viene de esa palabra sino de que "viene de la expresión latina mandat opus que significa la necesidad obliga".
Para terminar, Héloïse Guerrier ha señalado que las expresiones que no han incluido en el libro responden a que "era muy difícil de plasmarlas a modo de ilustración", para lo que se ha referido a "verdades como templos", afirmando que "la verdad no se puede dibujar". "Lo que me interesó mucho es la interpretación del ilustrador en el libro, me gusta el contraste entre el texto y las imágenes", destacó.