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Regresan a España siete cascos celtibéricos expoliados del yacimiento de Aranda de Moncayo

Proceden de la ciudad celtíbera de Arátikos, erigida en la Edad del Hierro y destruida por el ejército de Roma entre los años 74 a 72 antes de Cristo.

Uno de los siete cascos celtibéricos expoliados en los años 80 del yacimiento de Aranda de Moncayo | Ministerio de Cultura

España ha recibido este miércoles siete cascos celtibéricos expoliados en los años 80 del pasado siglo del yacimiento de Aranda de Moncayo, en Zaragoza, y expuestos hasta ahora en el Museo de Arte Clásico de Mougins, cercano a Niza.

Las piezas de bronce, fechadas entre los siglos VI y III aC., viajarán en los próximos días a España para incorporarse a la colección permanente del Museo de Zaragoza, donde serán estudiadas antes de su exposición pública.

El director general de Bellas Artes destacó en París la importancia de la colaboración conjunta de personas e instituciones que ha hecho posible esta restitución arqueológica. "En la lucha contra el tráfico ilícito de bienes culturales solo la suma de los esfuerzos de todos es la garantía de éxito", señaló, mencionando expresamente el trabajo de la comunidad científica, de la Fiscalía Coordinadora de Medio Ambiente, Urbanismo y Patrimonio.

Los siete cascos celtibéricos expoliados en los años 80 del yacimiento de Aranda de Moncayo | Ministerio de Cultura

Con la entrega en París se pone fin a las gestiones iniciadas en septiembre de 2018 por el embajador de España ante la Unesco, Juan Andrés Perelló, quien informó al Ministerio de Cultura del interés del coleccionista Christian Levett por devolver los siete cascos que había adquirido —sin conocer su origen ilícito— en dos subastas celebradas en los años 2008 y 2009 y en el mercado anticuario en 2012, y que había depositado posteriormente en el museo fundado por él en la localidad francesa de Mougins.

Arátikos, la ciudad celtíbera destruida por el ejército romano

Los siete cascos devueltos a España proceden de la ciudad celtíbera de Arátikos, erigida en la Edad del Hierro y destruida por el ejército de Roma entre los años 74 a 72 antes de Cristo, con motivo de las guerras sertorianas que también acabaron con Numancia. Este asentamiento se situaba en el llamado Cerro de Castejón, sobre la localidad de Aranda del Moncayo, en Zaragoza.

Desde finales de los años 80 y principios de los 90 del siglo XX, la necrópolis fue expoliada de manera sistemática por dos vecinos que llegaron a reunir una extraordinaria colección de piezas metálicas celtíberas correspondientes a la edad del Hierro.

Entre los hallazgos se encontraban restos y fragmentos de un lote de 18 cascos celtíberos de factura hispano-calcídica que fueron exportados ilegalmente al extranjero por los autores del expolio con la colaboración de un anticuario español, residente en Suiza. Dos de esos cascos se vendieron en Londres, otro en Hong Kong, y los 15 restantes fueron adquiridos por el alemán Alex Guttmann en Berlín, considerado el mayor coleccionista privado de armas antiguas del mundo, quien incorporó las piezas a su colección hasta su muerte.

Después su fallecimiento, en 2001, los herederos vendieron parte del lote de cascos y siete de ellos —los ahora devueltos a España— terminaron en la colección de Christian Levett.

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