Los productores y los contables de una película son los encargados de realizar las cuentas y saber qué cuesta sacar adelante una superproducción de Hollywood. De vez en cuando, en ese inventario se cuelan objetos con un coste que desbarata cualquier presupuesto. Es lo que ocurrió con los guantes que presuntamente le costaron una millonada a los productores de James Bond, según dos tuits publicados por el cineasta, productor, periodista y crítico de cine Charlie Lyne.
Lyne asegura que alguien que trabajó en Skyfall, la penúltima entrega de la franquicia, le contó una particular historia sobre cómo unos guantes que Daniel Craig se compró durante el rodaje resultaron un gran quebradero de cabeza para el director, Sam Mendes y todo su equipo de postproducción.
A través de dos vídeos en Twitter, Lyne explica que los guantes de cuero que Daniel Craig incorporó al personaje de James Bond tuvieron que ser eliminados con efectos especiales.
Here's a story I heard about James Bond... [1/2] pic.twitter.com/3gtOdBeowO
— Charlie Lyne (@charlielyne) 27 de junio de 2016
Y es que Craig llevaba puestos estos guantes cuando filmó las escenas en la que empuña una pistola diseñada por Q (Ben Wishaw) que solo reconoce sus huellas dactilares, por lo que tuvieron que subsanar este error en la fase de edición de la película. Tuvieron que eliminar los guantes y sustituirlos por unas manos digitales en la escena del casino, en la que el espía se enfrenta a varios enemigos. Este arreglo habría costado millones de dólares.
Pero los guantes no desaparecen del todo en Skyfall. En una escena en Shanghai, Bond lleva puestos los famosos guantes cuando porta su nueva arma que solo reconoce sus huellas dactilares. Un descuido que no se subsanó en la fase de post-producción.
Además, después de esta secuencia, hay una escena en la que Bond se tiene que quitar los guantes para que la pistola reconozca sus huellas, en lo que podría ser una escena rodada después de que hubiera finalizado el rodaje inicial.