Ryan Reynolds volverá a ponerse en la piel de Wade Wilson, tras confirmar su presencia en la segunda entrega de la saga sobre el controvertido superhéroe, Deadpool. El acuerdo entre Reynolds y la productora 20th Century Fox, del que todavía se desconocen las cifras definitivas, podría suponer un incremento en el salario del actor, que cobró unos dos millones de dólares por la primera película.
El actor ha renegociado las condiciones con las que firmó para la primera película, algo que es perfectamente acorde al éxito de la cinta dirigida por Tim Miller, que se ha convertido no solo en la película con calificación R más taquillera de la historia con 754 millones de dólares (superando los 742 millones que recaudó Matrix Reloaded) sino además en la cinta de los X-Men que más dinero ha reportado en las arcas de Fox, que ahora "devuelve el favor" a su nueva estrella mutante.
Reynolds ya declaró su amor eterno a Deadpool, durante la promoción de la película. El actor confesó que, tras pasar 11 años luchando por que la primera película saliera adelante, seguiría ligado al mutante mientras le fuera posible. "No quiero volver a interpretar a ningún personaje de cómic nunca más. En cambio, dar vida a Deadpool durante el resto de mi vida sería divertido", afirmó.
La secuela, que podría presentar otros mutantes como Cable o Domino, tiene previsto su estreno para los primeros meses de 2018.