Hace mucho tiempo que el arte se descolgó de los muros para integrarse en nuestra vida diaria. El Museo Thyssen lo sabe bien, por eso ha incorporado a su tienda una colección de artículos para el hogar diseñados en exclusiva por la marca francesa Ibride. Estos diseños evidencian las amplias posibilidades de colaboración que hay entre la pintura clásica y la creación contemporánea, y de paso, viste nuestras mesas con un capítulo de la historia del arte.
En concreto, se trata de una vajilla de ocho elementos, ampliable a un total de 12, inspirados en obras como Retrato de una dama como santa Lucía, de Giovanni Antonio Boltraffio, La carta amorosa, de François Clouet, o Adán y Eva, de Jan Gossaert. La colección se completa con dos bandejas, una inspirada en Retrato de Jacques Le Roy, de Van Dyck y otra en Retrato de Catherine Hill, de Copley.
"Todos los diseños tienen un anclaje artístico muy profundo", afirmó Rachel Convers, diseñadora de este proyecto. Durante un paseo por las distintas salas del Thyssen sintió que su corazón "dejaba de latir". "Sentí que era una mariposa que visitaba cada lienzo. Me imaginé cómo esta mariposa se iba posando en los cuadros y creaba un diálogo con todos los personajes, un diálogo que también puede verse en la vajilla. La idea definitiva es una historia de amor", añadió.