El inicio de la obra de esta catedral dio comienzo en el siglo XII, año 1124, a instancias del primer obispo y señor de Sigüenza, después de la Reconquista. Se prosiguieron las obras a través de la Baja Edad Media, quedando completo el edificio en el siglo XV. Este año se cumple el 850 aniversario de la consagración de esta emblemática catedral.