La textura de los vestidos de las jóvenes, el cabello con el que juegan y se enredan las manos, los perros en brazos de figuras femeninas o hasta la espesura de un jardín. La pintura de Pierre-Auguste Renoir se puede tocar con la vista. El artista francés, uno de los principales exponentes del impresionismo, sugería sensaciones táctiles de volumen, materia y texturas para plasmar la intimidad en sus diversas formas. Dotaba a sus figuras de una cercanía tangible y jugaba con la sensualidad de la pincelada y la superficie pictórica.
El Museo Thyssen de Madrid presenta hasta el 22 de enero una exposición sobre el artista francés que incide en las sensaciones táctiles de sus lienzos, presentes en las distintas etapas de su trayectoria y en una amplia variedad de géneros, tanto en escenas de grupo, retratos y desnudos como en naturalezas muertas y paisajes. Se trata de una selección de 78 obras, procedentes de museos y colecciones de todo el mundo como el Art Institute de Chicago, el Metropolitan de Nueva York o la National Gallery de Londres, comisariada por Guillermo Solana, director artístico del Museo Thyssen.
Miraba las flores, las mujeres, las nubes del cielo como otros hombres tocan y acarician. (Jean Renoir, cineasta e hijo del pintor).
"Renoir es junto a Monet el otro gran fundador del impresionismo y, sin embargo, sigue siendo un desconocido, un incomprendido o alguien detestado, no termina de llegar al público", explica Solana.
Renoir detestaba a los intelectuales. Pensaba que eran unos "tarados incapaces de oler o de tocar, que los sentidos no les funcionaban", advierte el comisario. Por eso, para Renoir, lo más importante eran los cinco sentidos por encima del cerebro. Sentir antes que pensar. "Su ambición es que el espectador no sea solo un ojo, sino que aprecie su obra con los cinco sentidos".
Se ha escogido el título "Renoir: intimidad" para matizar un rasgo central de su producción, su deseo de imprimir a la obra una sensación de proximidad y cercanía. "El espectador debe sentirse invitado", apunta Solana. La retrospectiva busca mostrar la expresión suprema de Renoir de la intimidad, que no son los desnudos, sino las escenas domésticas, cuadros en los que se ve a Aline, su mujer, o a Gabrielle, la niñera, cuidando de sus hijos. "Es casi un diario de su familia", subraya Solana.
Los desnudos impresionistas de Renoir
El impresionismo nació a finales del siglo XIX como reacción contra el arte académico y es considerado el punto de partida de las vanguardias. Inmortalizaban el mundo cotidiano y su espontaneidad, con especial atención a los efectos de la luz y los paisajes. Sin embargo, Renoir fue el impresionista que más se abrió a otros géneros pictóricos, dejándose llevar por la influencia de la pintura veneciana, la flamenca y la pintura francesa del siglo XVIII que con tanta asiduidad contemplaba en el Museo Louvre. "El desnudo fue un hilo conductor en la obra de Renoir desde su época preimpresionista, fueron sus primeros éxitos, y lo mantuvo a pesar de su poca conexión con el impresionismo. Es un género con el que se reconcilia con la tradición", advierte Solana.
El periodo impresionista de Renoir destaca entre 1870 y 1883. A partir de 1889, cambió su estilo, mezclando el impresionista con el ingresco, con una mayor presencia de colores fríos, y formas femeninas de amplias curvas, casi rubenescas.
Alrededor de 1883, una ruptura ocurrió en mi obra. Había llegado al final del impresionismo, a la conclusión de que no sabía dibujar o pintar. En una palabra: estaba en un punto muerto. (Renoir)
Recorrido temático
"Renoir: intimidad" sigue un recorrido temático: impresionismo, lo público y lo privado (Retrato de la mujer de Monet, 1872-1874; Mujer con sombrilla en un jardín, 1875); Retratos de encargo (La Sra.Thurneyssen y su hija, 1910); Placeres cotidianos (La maceta verde, 1882); Paisajes del norte y del sur (La bahía de Salerno, 1881); La familia y su entorno (Gabrielle, Jean Renoir y una niña, 1895-1896); y Bañistas (La fuente, 1906).
Esta muestra se exhibirá posteriormente en el Museo de Bellas Artes de Bilbao, entre el 7 de febrero y el 15 de mayo de 2017.