El polémico profesor Gunther von Hagens, famoso por "plastinar" cuerpos humanos y mostrarlos en exposiciones itinerantes por todo el mundo, lo que le ha valido el sobrenombre de Doctor Muerte, abrirá el próximo enero en Berlín su primer museo.
El Tribunal Administrativo de Berlín dio el visto bueno a la apertura de la exposición permanente a los pies de la emblemática torre de televisión en Alexanderplatz, después de estudiar las reservas manifestadas por las autoridades sanitarias del distrito berlinés de Mitte, que se oponían al proyecto.
Los impulsores del museo -el profesor Von Hagens y su esposa y comisaria de las exposiciones itinerantes, Angelina Whalley- no necesitan ningún permiso especial para cumplir con la ley de servicios funeraria, ya que los cuerpos "plastinados" no son cadáveres en el sentido legal, argumentó Björn Schaefer, el juez que preside el tribunal.
"Ninguna de nuestras exposiciones de cadáveres en Berlín en los años 2001, 2009 y 2011 precisaron de un permiso especial", señaló Whalley en un comunicado emitido en noviembre. Según argumentó, tampoco la muestra permanente del Museo de Historia de la Medicina de la clínica universitaria de la Charité requiere de un permiso según la ley funeraria, "a pesar de exponerse allí cuerpos y partes de cuerpos".
El primer museo de Von Hagens y Whalley, que inicialmente tenía previsto abrir sus puertas en diciembre, expondrá alrededor de 20 cadáveres y hasta 200 preparados.
Para el profesor Von Hagens, que el próximo día 10 cumple 70 años, la inauguración del museo supone la realización de "un sueño largamente anhelado". Con la exposición de cadáveres quería "recordar al visitante que el mayor bien que poseemos es nuestro propio cuerpo", subrayaba en ese mismo comunicado el profesor, que sigue activo a pesar de padecer Parkinson.
Von Hagens saltó a la fama tras "plastinar" su primer cadáver en 1990, una técnica de preservación de material biológico patentada por este alemán que consiste en sustituir los líquidos y lípidos naturales del cuerpo por resinas elásticas de silicona y materiales rígidos.
En 2006, Von Hagens abrió en la pequeña localidad de Guben (este de Alemania) su taller museo "Plastinarium", de 2.500 metros cuadrados, con decenas de cuerpos enteros -algunos en posturas cotidianas- y una gran cantidad de partes, extremidades y órganos.