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Amando de Miguel

El capital oculto de los españoles

El capital oculto de los españoles y de los hispanoamericanos (más de 600 millones de habitantes; se dice pronto) es la lengua común, la de Pérez Galdós o la de Vargas Llosa.

El capital oculto de los españoles y de los hispanoamericanos (más de 600 millones de habitantes; se dice pronto) es la lengua común, la de Pérez Galdós o la de Vargas Llosa. Representa tanto o más que el capital físico o, incluso, que la acumulación de inteligencia y trabajo.

El capital más valioso y oculto, un verdadero tesoro, es la facilidad para el uso cotidiano de una de las pocas lenguas de comunicación internacional que hay en el mundo. Téngase en cuenta que la humanidad dispone hoy de más de seis mil; la mayor parte ni siquiera se escriben. Esa calificación que digo no se deriva solo del número de hablantes, sino de la acumulación literaria con validez universal. Muy pocas lenguas pueden mostrar el equivalente de tipos literarios tan conocidos en todo el mundo como don Quijote o don Juan. El indicador más medible es el número de personas que no tienen el español como legua materna y que la están aprendiendo. Así definido, el primer idioma del mundo es el inglés, pero el segundo puesto (a bastante distancia, es cierto) corresponde al español. Se trata de un hecho natural en el que ha contado poco la influencia política. Quizá haya sido más decisivo el dato de que el español cuenta con una red de academias que fijan y dan lustre al idioma. La matriz es la Real Academia Española.

Una característica notable del idioma español es que se aprende rápidamente gracias a su simplicidad fonética. La prueba es que los hispanohablantes mínimamente educados no necesitan deletrear una palabra nueva o poco oída para saber cómo se escribe. Es algo que no ocurre con el inglés, por ejemplo.

No deja de ser una triste ironía que en Cataluña los que mandan se hayan propuesto erradicar el castellano de la vida pública. No han aprendido la lección de Irlanda, hoy una economía próspera, que ha conseguido impulsar el negocio de enseñar inglés a muchos extranjeros que no son angloparlantes. Barcelona inició hace muchos años esa misma iniciativa respecto al castellano, pero todo se ha ido al garete. Aun así, a pesar de la inmersión de los estudiantes en la lengua catalana, hoy prácticamente todos los habitantes de Cataluña se pueden expresar en castellano. Es algo que sucede por primera vez en la historia. Otra cosa es que muchos jóvenes profesionales de Cataluña se defiendan mal por escrito en castellano. Se consuela uno pensando que lo harán mejor en inglés.

La cuestión no es conocer el castellano, sino atenerse a las reglas de la escritura, por otra parte, muy sencillas. Recientemente hemos visto que la ministra de Educación y portavoz del Gobierno escribe "educación" sin acento. Conviene recordar que estudió en las universidades de Deusto y de Valladolid y llegó a ser catedrática de instituto. Es muy posible que maneje un teclado sin tildes, pero no da ejemplo a los escolares. Acabarán creyendo que eso de las normas de ortografía es un resto de un ambiente facha. Por cierto, la palabra facha con ánimo despectivo se empleó en España mucho antes de que en Europa se empezara a hablar de fascismo. Recuerdo la conversación con un alumno de quinto de carrera hace ya algunos lustros. En un examen había escrito la palabra vergüenza sin diéresis. Se la corregí, pero me contestó con naturalidad que la cosa no tenía importancia, que lo de los dos puntitos era "un resto del castellano antiguo" y, por tanto, ya no se estilaba.

Desasosiega un poco ver cómo algunos altos cargos del Estado no parecen dominar la lengua común de los españoles. Son raros los que saben hablar en público sin leer el texto, incluso los que se dicen portavoces. Por ese lado también se malgasta el capital oculto del idioma. Sabemos que la calidad del aprendizaje del idioma común ha descendido mucho en España. Así que no debe extrañarnos que lleguen a los altos puestos de la política algunas personas que han egresado de un bachillerato degradado.

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