Luis García Montero ha tomado posesión este miércoles de su cargo como director del Instituto Cervantes. Con él han estado su mujer, Almudena Grandes, amigos del poeta como Fernando León, Pilar y Carlos Bardem y Joaquín Sabina y varios ministros, entre ellos Carmen Calvo, que ha tomado la palabra para felicitar a Montero.
En su discurso, en el que ha dicho, entre otras cosas, que el Instituto Cervantes es un instrumento con el que España "se llena de buen nombre" y que el mundo de la cultura es "el mejor mundo al que se puede pertenecer", la vicepresidenta también ha hablado de igualdad. Y lo ha hecho en una poco afortunada frase final que ha dejado ver que no conoce demasiado bien la principal obra de Cervantes:
Hay que proteger a don Alonso, pero también a Sancho, a Aldonza y a Dulcinea, porque no hay mejor cultura que la igualdad.
La ministra trataba de citar a dos personajes femeninos de El Quijote pero ha patinado en el intento: Aldonza y Dulcinea son en realidad el mismo personaje. Dulcinea del Toboso es la dama ideal a la que dedica sus hazañas el caballero andante y Aldonza Lorenzo es la mujer real, la campesina que le sirve de inspiración. Quizás Calvo intentaba referirse a la mujer de Sancho al aludir a Aldonza. O quizás simplemente lanzó al azar dos de los nombres femeninos que aparecen en la novela sin percatarse del error. De quien confundiera el latinajo dixit con los ratones de dibujos animados Pixie y Dixie cuando era ministra de Cultura cabe esperar cualquier cosa.