John Waters hizo aquella promoción de la lectura donde decía lo que todo el mundo repite: "Necesitamos hacer que los libros molen de nuevo. Si vas a casa de alguien y no tiene libros no te lo folles". Hombre, alguien que no tiene libros puede ser preferible a otro que tenga según qué títulos. El lugar común de Waters es aplicable a muchas cosas. Por ejemplo, "Si no le gustan Las chicas Gilmore ni te acerques". Y lo mismo se puede decir de Sonrisas y lágrimas (aunque siempre fantaseo con que al final los cojan los nazis y los manden a Auschwitz). Y si te gustan Las chicas Gilmore lo lógico es que te guste ‘La maravillosa señora Maisel’, la nueva serie de Amy Sherman-Palladino y Dan Palladino, los creadores de las Gilmore, que han encontrado en Amazon su nueva casa.
La adorable Rachel Brosnahan acaba de ganar el Globo de Oro por su interpretación de Midge Maisel (la serie también lo ha ganado como mejor comedia o musical). Es una ama de casa judía, neoyorquina y acomodada de los años 50 que cuando su marido la deja por la secretaria se dedica a la stand up comedy (hasta recibe ayuda de Lenny Bruce). Siendo ella lo mejor de la serie (es de la misma especie que Lauren Graham y Sutter Foster, no sé de dónde las saca Amy Sherman-Palladino), tengo devoción por Alex Borstein, que interpreta a Susie, la amiga, descubridora y manager de Midge. Tiene las mejores frases. Mi favorita es cuando va a ver a un tipo puenteando a su secretaria y dice de ella: "Es mitad tonta, mitad tetas". Juntas, Midge y Susie son como Leoncio y Tristón. La alegría de vivir y la tía más ceniza. Es la voz de Lois Griffin en Padre de familia. También la hemos visto en Shameless, pero sobre todo de enfermera en Getting on, la deprimente serie de la HBO sobre un geriátrico.
The marvelous Mrs. Maisel, cuyos ocho capítulos saben a poco, ha sido renovada por una segunda temporada. El padre de Amy Sherman-Palladino era monologuista, pero esta serie no va de eso como Crashing’o ‘Morir de pie. Va de Midge, mujer maravillosa que muta de ama de casa perfecta en humorista. Tan perfecta que se acuesta y se levanta maquillada y peinada, aunque para ello deba dormir menos y quitarse los rulos antes de que su marido se despierte (luego vemos que su madre también lo hace). Esa mujer que deja el Upper West Side (bueno, no lo deja) para trabajar en el Village. O para echar a perder su carrera al poner verde a Sophie Lennon, una reconocida estrella de la comedia interpretada por Jane Lynch. La extraordinaria Sue Sylvester de Glee tiene dos papeles recientes bastante destacables. Y se habla poco de ello. O nada. Este papel de Sophie Lennon y el de Janet Reno en Manhunt: Unabomber (mucho mejor que Linda Gehringer en Ally McBeal, de cuya papada estaba prendado Richard Fish). Que sí, que Alison Janney es un trueno en I Tonya como madre chiflada y fea de la patinadora (otra con Globo de oro), pero Jane Lynch también está magnífica en sus dos pequeñas intervenciones televisivas.
Hay muchas razones para ver La maravillosa señora Maisel. Ese Nueva York de los 50, Jane, Alex, Rachel… Y Amy Sherman-Palladino, que lo ha vuelto a hacer.