L. D.- “Furia”, la octava y esperada novela del escritor de origen indio Salman Rushdie, no ha logrado convencer a la crítica americana, que no ha dudado a la hora de ensañarse con la obra. La prensa norteamericana considera que el libro ha fracasado a la hora de reflejar la complejidad de los Estados Unidos, el país en el que se desarrolla la trama. Incluso llega a decir que el escritor exhibe en la obra una actitud de superioridad típicamente británica.
El prestigioso diario The New York Times ha calificado la novela como “decepcionante”, en parte porque considera que la ciudad de los rascacielos no ha quedado bien representada en la obra. Por su parte National Post señala en su reseña que el libro es simplemente “malo”, y que “Rushdie, árbitro de culturas, al meter a todos en el mismo cajón, simplemente no entiende América. Como otros muchos observadores de EE.UU., sobre todo los británicos, sólo puede entender su energía –su furia-, si anticipa la defunción del país”.
Tintes autobiográficos
En “Furia”, una novela con claros tintes autobiográficos, el autor de obras laureadas como los “Versos satánicos”, “Hijos de la medianoche” o “Vergüenza”, narra la crisis de un hombre de mediana edad que guarda demasiados parecidos con el propio Rushdie: nació en Bombay, India, fue profesor en el Reino Unido, y reside ahora en Nueva York, donde asiste a aburridas fiestas de la alta sociedad norteamericana. La única diferencia entre el protagonista de la novela y el escritor, es que el personaje de ficción se dedica a crear una muñeca tras haber abandonado el Reino Unido ante los impulsos asesinos que le entran de matar a su esposa y a su pequeño hijo. Algo de lo cual no existe ninguna evidencia en la vida real.
En cualquier caso, diga lo que diga la crítica, “Furia” ha contado con un espectacular lanzamiento editorial: los miles de ejemplares editados le aseguran al escritor angloindio un puesto entre las obras más vendidas durante las próximas semanas.