Eduardo Mercado, investigador de la Universidad de Búfalo y autor del estudio, asegura que la plasticidad cognitiva, la capacidad de aprender y mejorar habilidades cognitivas como resolver problemas y recordar eventos, se encuentra en el módulo cortical. Este es una serie de columnas interconectadas por células neuronales. Dichas columnas varían en número y en la diversidad de neuronas que contienen en cada ser humano.
Estudios anteriores han demostrado que, en promedio, cuanto mayor es el cortex cerebral, mayor la inteligencia. Pese a que aún no está claro la razón de este hecho, Mercado sugiere que un córtex mayor permite un número más alto de módulo corticales donde varios tipos de neuronas puedan “convivir”. De este modo, la organización cortical determina cuan efectivamente nuestro cerebro, es capaz de distinguir eventos. Esta habilidad sería la que nos permite aprender nuevas habilidades.
Esto implica que la experiencia es tan importante como la genética a la hora de determinar nuestra capacidad intelectual pues durante el desarrollo y los primeros años de aprendizaje, las distintas experiencias producen cambios muy específicos en los módulos corticales.
Esta investigación podría tener importantes repercusiones en lo que respecta a técnicas educativas y en métodos para la rehabilitación de pacientes con daños cerebrales. Y, eventualmente, también nos podría ayudar a incrementar nuestra inteligencia. Aunque Mercado advierte que “las nuevas tecnologías para ampliar nuestra plasticidad cognitiva, tiene implicaciones éticas que van mucho más allá del dopaje en los deportes. Aún así, a partir de ahora la frase cambia tu mente podría tener un nuevo significado”.