La fórmula del editorial conjunto sigue ganando adeptos y, curiosamente, parece concentrarse en las "causas" que argumentalmente más difícil resulta defender y que, quizá precisamente por eso, necesitan el calor del grupo: si hace unos días nos desayunábamos con el editorial de la prensa catalana sobre el Estatuto, hoy 56 periódicos de 45 países, entre ellos El País en España, publican un texto conjunto sobre el cambio climático con el título: "Frente a una grave emergencia".
Entre los firmantes destacan, además del rotativo de Prisa, algunos periódico de renombre internacional, aunque son los menos, como el The Guardian o Le Monde, y sobre todo cabeceras del tercer mundo y con escasa influencia como el Zimbabwe Independent, el Botswana Guardian o el Daily Monitor de Uganda.
También lo han publicado algunos medios hispanoamericanos como el Clarín argentino o El Universal de México, pero sólo dos periódicos estadounidenses se han hecho eco y no son de los más influyentes: el Miami Herald y El Nuevo Herald.
El editorial, que al parecer ha sido fruto de un arduo proceso negociador que ha durado meses, exige paradójicamente a los responsables políticos de todo el mundo que lleguen a un acuerdo sobre la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero en sólo los 14 días que durará la cumbre en la capital danesa.
Algunas inexactitudes y un gran olvido
El artículo está escrito en un tono particularmente alarmista y habla del cambio climático como "una grave emergencia", asegurando que "causará estragos en nuestro planeta y, con él, en nuestra prosperidad y nuestra seguridad".
Además, se dan por sentado algunos hechos que son cuanto menos discutibles cuando no inciertos, por ejemplo afirma que "11 de los últimos 14 años han sido los más calientes que se registran, el casquete polar del Ártico está derritiéndose y la increíble subida de los precios del petróleo y los alimentos el año pasado nos ofrece un anticipo del caos que se avecina".
La realidad es que la temperatura lleva unos diez años sin experimentar las subidas que los expertos del IPCC habían previsto, que el casquete polar del Ártico vuelve a crecer, que el precio del petróleo en 2008 bajó desde unos 100 dólares el barril hasta menos de 40 y que los alimentos han subido, en gran parte, gracias a la demagogia ecologista de los biocombustibles.
Y, por supuesto, el editorial olvida por completo el recientemente destapado Climagate, y ni siquiera se toma la molestia de rebajar la importancia de los correos o de considerarlo "una oscura conspiración", como han hecho algunos medios.