El estudio ha sido llevado a cabo por el blog Desde el Exilio, que ha elaborado una comparativa de los datos proporcionados por la web de la Agencia Española de Meteorología, sobre las temperaturas en España desde 1971 al 2000.
Desde el blog se llama la atención con que la Agencia estatal no proporcione datos de las temperaturas sobre períodos históricos anteriores al período 1.971-2.000. No obstante, estos datos están recogidos en el libro Guía Resumida del Clima, disponible en papel, que fue editado en 1982 y recoge resultados referidos al período de 1931 al año 1960.
Desde el Exilio alerta que al comparar ambas guías, se observa que la Red de Observatorios que recogen resultados de las temperaturas han cambiado, por lo resultaría engañoso comparar la media nacional para cada uno de los períodos de 30 años. Además, debe tenerse en cuenta la ubicación de los Observatorios, ya que los que están en el centro de la ciudad se ven influidos por el efecto "isla de calor".
Por ello, la única manera de establecer una comparación mínimamente seria es analizar caso a caso, observatorio a observatorio y después sacar las conclusiones pertinentes.
Tomando como ejemplo la Comunidad de Madrid, se detecta que los observatorios existentes en el período 30-60 aún existen, no han desplazado su ubicación, y siguen formando parte de la Red Principal. Son los observatorios de Retiro, Aeropuerto de Barajas y Puerto de Navacerrada
En el caso de Retiro, la temperatura media ha aumentado 7 décimas, en concreto de 13,9 a 14,6. Para comprobar si este aumento se debe al efecto "isla de calor", es conveniente compararlos con el resto de observatorios madrileños.
En el Puerto de Navacerrada el calentamiento local es negativo, la media de 1.930-60 es de 6,5 mientras que la de 1.970-2.000 es de 6,4. Una décima menos. También lo es el del Aeropuerto de Barajas también ha descendido, la media del 30 al 60 es de 14,4 y la del 70 al 00 de 14,1. ¡Tres décimas menos!
Lo mismo ocurre en el resto de España: unas décimas de incremento en algunos sitios (en general coincidiendo con observatorios urbanos) y unas décimas de bajada en otros. Ni calentamiento ni enfriamiento, al menos en niveles significativos.
Además de llamar la atención estas conclusiones, sobre todo es significativo que la AEMET