Cualquiera puede hacer su propia cinta de Moebius cortando una banda de papel, doblándola como si fuera una hélice y pegando los extremos. Tiene la propiedad de ser un objeto con una sola cara. Pero científicos del Instituto de Biodiseño y del Departamento de Química y Bioquímica de la Universidad de Arizona han realizado una cinta de Moebius uniendo segmentos de ADN de una medida de unos 50 nanómetros: apenas el tamaño de la partícula de un virus.
Hao Yan y Yan Liu son los responsables de la investigación y su propósito es capitalizar las propiedades únicas de la nano-arquitectura para desarrollar dispositivos biológicos y químicos que trabajen a escala molecular. Esta tecnología ha sido denominada como ADN-Origami o Kirigami.
Han asegura que su objetivo final es "estimular la técnica Kirigami para crear estructuras cada vez más sofisticadas y demostrar que se puede realizar cualquier forma o topología utilizando el autoensamblaje". El trabajo ha sido publicado en la revista Nature.