Análisis de 'Call of Duty: WWII'
Activisión acierta con volver la mirada a la II Guerra Mundial en su nuevo Call of Duty.
Las últimas entregas de la millonaria Call of Duty ofrecían la sensación de necesitar una renovación desde hacía tiempo. Daba la impresión de haberse quedado en ese lúgubre periodo de transición entre plataformas que comenzaba hace ya cuatro años. Los seguidores de la serie, cuyos designios dependen de Activision, se confesaban saturados y todos coincidían que la franquicia definitivamente no estaba mejorando cada año. Cuando oficialmente se confirmaron los rumores que enmarcaban el contexto de la próxima entrega en la Segunda Guerra, el anuncio no sólo marcaba un nuevo periodo para la veterana franquicia, también un retorno completo a sus raíces.
Regresamos de la mano del equipo californiano Sledgehammer Games a la mayor de todas las guerras, con un compendio de elementos y modos que revitalizan la serie a raíz de una campaña que consigue crear intensas bocanadas de adrenalina, un multijugador muy divertido y un modo zombi levemente renovado. Call of Duty WWII, trae una sobresaliente combinación de opciones para comenzar a disparar. De modo que sería bueno tener a mano un cargador extra para este viaje.
Una campaña con personalidad y regusto a clásico
Vamos a empezar hablando de la campaña del juego. Es muy satisfactorio volver a la segunda guerra mundial una vez más. El período histórico más querido por los fans estuvo saturado durante mucho tiempo, pero siempre resulta interesante formar parte del desembarco en la playa de Normandía (tal vez el tramo más esperado por los jugadores), visitar las devastadas ciudades francesas, avanzar por Alemania, y por supuesto, todo sin dejar de matar nazis por el camino. Como se puede intuir, la variedad de localizaciones es importante para materializar una campaña con ritmo, sustancia y mucha acción. La trama nos permite conocer la historia de todo un pelotón de la Primera División de Infantería de los EE.UU desde el prisma de Daniels, un joven recluta que debe lidiar con los horrores de la guerra y ganarse la aprobación de sus superiores.
Existen diferentes perfiles dentro del cuerpo de mando, como el sargento Pierson, que prioriza la misión por encima de todo, o el teniente Turner, que valora la vida de sus soldados sobre los objetivos. Estas relaciones de carácter conflictivo aportan una buena dosis de profundidad a una trama, que está bien construida y es capaz de mantener la atención del jugador de principio a fin. Por supuesto, hay momentos previsibles y la carencia de una figura que funcione como villano hace que el capítulo pierda algo de épica al final, pero a grandes rasgos, nada que estropee la experiencia. En el contexto general, Sledgehammer Games acierta en rescatar el clima de los primeros Call of Duty, más centrados en la guerra que en los personajes que participan en ella, aunque estos sean los portadores de la historia.
La desarrolladora no parece haber escatimado a la hora de utilizar los recursos que estábamos esperando. La ambientación es realmente buena, y es perceptible la cantidad de horas de trabajo que se han invertido para crear escenarios creíbles de la época. El ritmo tampoco deja muchos respiros entre secuencias de acción trepidantes y algunos de los mejores momentos que ha ofrecido la serie en mucho tiempo.
Aunque el comienzo puede parecer lento, cuando las cosas se calientan, se calientan, y mucho. Entre los objetivos contamos con varias misiones que se pueden situar en el mejor nivel de la franquicia. La desarrolladora ha sido capaz de agitar, sin mezclar, acción frenética con niveles donde lo importante es moverse en silencio, que aporta ese toque de furtividad y ofrece momentos de tensión de formas creativas distintas a las que nos tienen acostumbrados.
Disparos al modo de la vieja escuela
El estilo de juego en Call of Duty: WWII también parece haber sufrido una regresión y ha resuelto volver a sus raíces. Además de la ambientación, el formato de juego también se renueva con una serie de mecánicas clásicas. Por ejemplo, sólo se puede recuperar salud con los kits médicos repartidos por el escenario o bien, si te los entrega el sanitario del pelotón (solicitarlo es tan sencillo como acercarse y pulsar un botón). El mismo sistema se repite con la entrega de munición y explosivos, que se deben solicitar a un miembro de la patrulla. Esto incentiva el progreso estratégico, ya que la vida y los explosivos no se van a regenerar solos.
En determinados momentos de cada capítulo, la campaña nos permite realizar actos heroicos gracias a una novedosa mecánica. Por ejemplo, al salvar la vida de un soldado en batalla, el jugador lo incorpora a su grupo para proporcionar suministros. Existen varias secuencias, pero en todas, la acción se traduce en armarse de sangre fría para rescatar rápidamente a un aliado en una situación muy peligrosa y siempre en clara desventaja. Tras la salvación, estos agradecidos soldados nos premiarán con munición, botiquines, ofrecerán soporte aéreo y demás ayudas. En el caso contrario fastidia no acertar en un acto heroico, pero no conmueve y rápidamente el soldado caído queda en el olvido. Además, la violencia es moderada y se ha predeterminado a escenas cinemáticas que no se dejan ver durante el juego, de modo que la parte más visceral queda muy limitada.
Por desgracia, la desarrolladora ha perdido la oportunidad de crear secuencias capaces de generar vínculos emocionales más fuertes con los personajes, e incluso componer situaciones realmente impactantes que exploten los horrores de la guerra. La duración de la campaña no se extiende más allá de las siete horas en un nivel de dificultar elevado, pero no hay que preocuparse, una vez terminada la historia hay mucho contenido, desde un renovado modo zombi, hasta su famoso multijugador en línea.
Un modo multijugador más robusto
Aquí Call of Duty WWII se la juega con la temática de la Segunda gran Guerra. Reducir la movilidad y limitar la tecnología sin perder el ritmo que siempre ha caracterizado el modo en línea de la franquicia, podía suponer un grave problema, por suerte no ha sido así. En líneas generales, una jugabilidad con menos parkour, sin grandes acrobacias y sin la posibilidad de ver a través de las paredes, termina por generar partidas más divertidas y tácticas. Han crecido mucho las opciones para granadas, trampas y elementos bélicos de la época, que reemplazan a las miras térmicas y granadas de fósforo blanco. El nuevo sistema de clases ofrece ventajas en el armamento. Por ejemplo, la clase Expedicionaria, está más enfocada a utilizar rifles del calibre 12, mientras que los soldados de Infantería combinan rifles y subfusiles. Así, gracias al nuevo sistema Crear una clase, los jugadores eligen entre cinco divisiones, cada una con su instrucción básica, entrenamiento y habilidades con armas específicas. Esta reestructuración del multijugador dota a los usuarios de la habilidad de reforzar su estilo de juego personal.
Cada mapa está pensado para utilizar armas específicas, como la escopeta en las trincheras, la ametralladora en ambientes cerrados y con pasillos o el francotirador en mapas más abiertos. También hay algunos niveles cuya arquitectura mezcla el diseño para que todos los tipos de armas sean funcionales. Básicamente, el nivel de los mapas es muy bueno y son muy fáciles de recordar, lo que ayuda a crear una experiencia correctamente equilibrada. Pero tenemos más novedades interesantes, pues las cajas de recompensa ahora tienen poco impacto en el campo de batalla, ya que únicamente están destinadas a la cosmética de los personajes, como nuevos cascos, vestimentas y apariencias para las armas.
El denominado modo Guerra es una de las sorpresas más agradables de ‘WWII’. Se trata de una especie de campaña reducida online donde un equipo debe atacar un objetivo mientras otro lo defiende. Sin embargo, todo se contextualiza como una auténtica misión de la Segunda Guerra Mundial, con objetivos que varían según avanza la partida. Al final de la ronda, los papeles se invierten y la dinámica cambia. Sin duda, es una de las incorporaciones más celebradas del multijugador en los últimos años. Todo lo anterior confluye en el Cuartel General, una parcela limitada que reproduce el funcionamiento de un campamento militar. El modo se desarrolla en tercera persona y permite al jugador recoger su nómina, misiones diarias, comprar armamento y accesorios, abrir cajas de recompensa, probar puntería o tipos de bonificaciones de ataque, incluso se puede jugar viejos títulos de Activision en una especie de videoconsola.
Un inteligente lavado de cara para los zombis nazis
Como no podía ser de otro modo, Call of Duty WWII también incluye el popular modo zombi, pero con algunas variantes. Para la ocasión, tenemos una especie de campaña que está más enfocada en avanzar sobre objetivos que en defenderse de hordas infinitas. Aunque el modo ha ganado en interés, ahora es un poco más complicado al principio, pues muchos jugadores pueden confundirse con el cambio de rumbo. Como es costumbre, jugar con otras tres personas en el equipo supone el método más divertido de hacer frente a los zombis en la vertiente que más distancia toma de multijugador online convencional.
Es interesante comprobar como ahora tenemos clases incluso para el modo zombi, ya que el jugador puede asumir determinados papeles para desempeñar en el grupo. Las partidas pueden ser un poco caóticas al principio, pero tan pronto como el equipo entienda los objetivos y localice los elementos necesarios para avanzar, las sesiones de juego se convierten en ejercicios mucho más divertidos, que despliegan lo mejor de un modo completamente cooperativo.
Un paso adelante en la parcela técnica
A pesar de no ser el tipo de juego reconocido históricamente por sus elevados valores plásticos, Call of Duty: WWII solventa con maestría la parte técnica y la dirección artística. El juego se plasma de maravilla en pantalla y acumula una gran cantidad de detalles. Todos los niveles se han desarrollado teniendo en cuenta que existe mucha variedad entre ellos. La obra se ejecuta constantemente en 60fps sin ofrecer ni la más mínima muestra de agobio, al menos en PlayStation 4 Pro, plataforma que se ha empleado para realizar este análisis. Los títulos anteriores trataban de una forma diferente estas cuestiones, priorizando la calidad de imagen y otros efectos, lo que constantemente producía caídas.
En la parte sonora el juego también brilla: sea en la campaña con los sonidos de tiroteos, la lluvia e incluso la respiración del personaje, o en el multijugador al oír los pasos de los adversarios. La parcela de audio logra pasar la evaluación con nota. Mención aparte merece el desastroso trabajo de doblaje y ecualización que se ha realizado en la versión española. Por ejemplo, además de alguna desincronización facial y entonaciones poco inspiradas, pasa de un volumen muy alto en algunos tramos a prácticamente ni escucharse dependiendo del momento. Errores que a estas alturas tienen poca, o ninguna justificación.
Conclusiones
Call of Duty: WWII no es el juego perfecto dentro de la serie, ni uno de los mejores títulos de disparos de todos los tiempos, pero sin duda, es el mejor de los últimos capítulos de la franquicia. El modo zombi es muy bueno, el multijugador es extremadamente divertido, y la campaña tiene un ritmo sobresaliente. La ambientación en la Segunda Guerra Mundial era el aire fresco que la franquicia necesitaba para regresar con energías renovadas. El multijugador crece con el excelente modo Guerra y la adicción de clases ha resultado una buena idea para el modo zombi, que es aún más divertido y ha encontrado el punto de focalización perfecto para dinámicas cooperativas. El conjunto se ha bañado con unos gráficos por encima de la media ejecutándose a unos sólidos 60 fps. Quizá se podría haber aportado algún elemento emocional que destacara el terrible carácter de esta guerra y haber aumentado algo el nivel de violencia, que se percibe muy moderada. Pero esto no quita mérito ni es capaz de restar un solo minuto de la incontable cantidad de horas de juego que se pueden invertir en un gran título de disparos. Call of Duty regresa por donde vino en su día, y todos sus seguidores lo agradecen.
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