Nights of Azure 2 llega a España como una de más firmes promesas por parte de Tecmo Koei de poner a disposición occidental el mejor rol nipon. El resultado no defrauda: estamos ante un juego de inspiración anime de una factura que está muy por encima de lo visto en cualquier otra producción de este estilo; pero sobre todo se trata de un auténtico bombazo oriental con todos los ingredientes para triunfar en su país de origen… y, por ende, aquí también.
Nos encontramos con un RPG, pero que renuncia a las batallas lentas o los turnos a favor de combates ágiles y directos, como todo buen musou, lo que a fin de cuentas viene siendo un hack'n slash de estilo oriental, con sus enemigos de tipo clónico, sus combos y sus batallas en entornos controlados. Los escenarios en los que tiene lugar la aventura son fragmentos interconectados, que recrean partes de diferentes estilos (partiendo de Eurulm, la ciudad donde tiene lugar la trama central), pero entre ellos suelen desarrollarse interesantes escenas de vídeo en las que se relata el argumento, que se centra en un par de personajes femeninos: Aluche, una joven que cae frente a una emboscada enemiga y vuelve a la vida convertida en semi-demonio con nuevas habilidades, y Liliana, una hechicera que la acompaña en una travesía para intentar dar con la peligrosa Reina Luna.
Pero para ello no están solas, ya que el nuevo estado de Aluche hace que no sólo intervengan humanos en la trama, sino que una serie de demonios puedan integrarse en nuestros equipos, y no se trata de simples personajes controlados por la IA: además de recibir órdenes, cada uno de ellos –que reciben la denominación de servants– tiene habilidades propias, trasfondo argumental y en general, se encuentran al nivel de cualquier otro personaje de los que toman parte en la acción.
Mucha adrenalina, pero en un RPG
No podemos desviarnos y olvidar que pese a todo lo anterior, nos encontramos ante un RPG, aunque este escapa, en gran medida, a la complejidad de los títulos de vieja escuela. La finalidad: hacer que las mecánicas roleras se integren en la acción de una forma sutil, progresiva y que no corte el ritmo de que hacen gala los combates. Es por ello que la mejora constante de los miembros de nuestro equipo permite avanzar en un sencillo árbol de habilidades, el cual no va a significar en general que variemos nuestro estilo de juego. Los combos se siguen ejecutando de manera directa, y el estilo de combate no varía desde el principio hasta el fin, aunque en ocasiones las mejoras estén enfocadas a que seamos capaces de enfrentarnos a desafíos de mayor tamaño.
Existe una mecánica básica a la hora de aplicar las habilidades centrada en varios aspectos: el primero el ataque, el segundo la defensa y, en tercer lugar, los movimientos especiales que desatamos junto a nuestra compañera de aventuras, pero estos últimos requieren de una recolección de líquidos previa. Y es que los enemigos dejan caer un fluido azul que se recolecta de manera automática y, poco a poco, rellena una barra especial que une a los dos personajes principales, desembocando en la habilidad de desatar el caos entre los enemigos gracias a su cooperación.
Antes de llegar a los combates, el funcionamiento es especialmente intuitivo y a la vez profundo. Por un lado, tenemos comandos habituales: golpe normal (y rápido), golpe fuerte (requiere más tiempo y bajar más la guardia) y salto, que a su vez puede añadirse a las diferentes combinaciones de los anteriores para provocar aún más daño; al conjunto se añade también la defensa, basada en la habilidad de bloquear (sólo útil con algunos enemigos) y la de rodar por el escenario para evitar las agresiones.
Una vez dominadas las diferentes combinaciones de botones, todo se vuelve una sucesión de secciones en las que machacar el mando hasta dejar la pantalla limpia de enemigos, pero con un componente estratégico: nuestros aliados (incluidos los servants) saben acatar órdenes. Es aquí donde el aspecto táctico del juego se desata, obligando al jugador a tomar decisiones y potenciar el combate, dando lugar a situaciones que evolucionan entre ellos, también en la trama, lo cual a priori parece no tener importancia, pero la realidad es que puede desembocar en un final u otro para la historia.
Un viaje bastante largo
Nights of Azure 2 no es un juego corto. De hecho, estamos ante uno de los RPG más extensos, aunque sea sólo en su modo campaña: 15 horas de contenido dentro de la línea argumental principal, a los que sumar hasta otras 15 en las que descubrir secretos, explorar el pasado de personajes secundarios y hacerse con todos los elementos del mapeado. Una empresa nada fácil que permite sentir que el dinero invertido en el título cristaliza en pro de una experiencia duradera. Además, pese a lo asequible que se muestra durante los primeros compases, si hablamos de dificultad, es cuestión de horas que el jugador dependa de un buen control de su equipo, haciendo que el rol táctico se convierta así en el eje central de la experiencia para PlayStation 4 y Nintendo Switch.
Disfrutamos mientras tanto de una historia relatada mediante escenas interconectadas, escuchamos las voces originales en japonés (obviamente no es el caso de los textos, que llegan a Occidente convenientemente localizados al inglés) y somos testigos del desarrollo de la trama, que va tornándose más oscura y retorcida conforme se descubren nuevos detalles sobre la Curia, una organización secreta para la que acabamos trabajando, y que ha sido el artífice de nuestra resurrección. Estamos en deuda, y a la vez queremos proteger a Liliana. El juego se revela, así como un relato interactivo, que requerirá del uso de los botones para, incluso, hacer avanzar los diálogos.
La adaptación del estilo anime más detallada
Por suerte, estamos ante un producto que técnicamente está muy lejos de otras propuestas similares (para bien), y que no intenta abusar del estilo cel-shading integrando partes "dibujadas" como es el caso de otras sagas. Aquí vamos a hacer uso de un potente motor tridimensional que nos trae reminiscencias de diversas entregas de la saga Atelier, pero que demuestra que está pensado para las máquinas de generación actual; en este caso PS4 y Nintendo Switch.
La atmósfera del juego en general tiene un efecto "dulcificado", con partes nebulosas que se hacen notar especialmente en las escenas, entornos con muchos elementos naturales (como flores y árboles) y todo imbuido de una tonalidad pastel que hace que nos sintamos más cerca de unos dibujos animados, lo cual no quita que en ningún momento todo sea totalmente tridimensional y detallado. Mención aparte merecen los diseños: las protagonistas son un grupo de voluptuosas jovencitas (con afán por mostrar lo mejor de su físico en todo momento) que se sincronizan a la perfección con los estereotipos en los que se basan. Por otra, los demonios y grandes enemigos impresionan.
Dicho esto, merece mención especial el gran uso que se ha dado a los efectos de iluminación mediante el fuego. No podemos olvidar que la oscura atmósfera que rodea al título está ambientada en el siglo XIX, siendo este uno de los pocos títulos de origen japonés en el panorama actual que no intenta imitar exclusivamente entornos orientales, sino que se atreve con Europa como inspiración central. Pero esto es algo que sólo afecta a la estética: en todo momento, cada personaje, demonios enemigo y secundario mantienen el estilo anime y el lenguaje original, haciendo que la firma japonesa esté marcada hasta lo más profundo del juego. Y es algo que también se deja notar en el apartado sonoro: la banda sonora es épica a la vez que animada, mientras que las voces gozan de ese punto que roza lo grotesco por la explícita expresividad de las dobladoras del país nipón.
Conclusiones
Nights of Azure 2 nos transporta a un mundo oscuro en el que continuamos una saga que está llamada a dar muchas alegrías en el futuro. Uno de los mejores productos con inspiración anime de los últimos meses y probablemente de este año, capaz de enganchar al jugador gracias a los combates directos y a la progresiva inclusión de elementos RPG, que no provocan interrupciones en el ritmo de la historia. Un juego a su vez tremendamente narrativo, con muchas líneas secundarias que descubrir gracias a la inclusión de un buen número de personajes y una trama llena de secretos, que el jugador degustará con mayor o menor profundidad en función de sus intereses y estilo de juego. Una obra obligatoria para los fans de los RPG nipones, por supuesto, pero también enfocado a los que disfrutan de la acción más directa.