La saga de acción Infamous estrena el próximo viernes 21 su tercera entrega con un nuevo protagonista, Delsin Rowe, un joven de 24 años que vive en una reserva indígena a las afueras de Seattle y que adquiere la habilidad de absorber poderes. Así, puede convertirse en neón o en humo.
"El gobierno decide crear un departamento de protección unificada precisamente para evitar que haya personas con superpoderes que puedan hacer lo que quieran. Delsin, al conseguir este poder de convertirse y controlar el humo, se convierte en el enemigo de este departamento", ha explicado a Efe el cofundador del estudio Sucker Punch, Brian Fleming.
Para aumentar el realismo del título, presentado este viernes en Madrid, el estudio ha recurrido a la tecnología de la captura de movimiento y ha grabado a actores reales. Según el creativo, Second Son, que tiene lugar siete años después de la última entrega de Infamous, destaca por la profundidad de su protagonista –inspirado en el actor de la película Jackass Johnny Knoxville– y por su potencia visual.
"Estoy muy satisfecho con el personaje: se ha escrito muy bien, el actor ha hecho un trabajo excelente y hemos podido mostrar esos detalles de las emociones que siente y eso hace que conectar con él sea sencillo para el jugador", ha sostenido. "En segundo lugar, y lo más obvio, es el aspecto visual, los gráficos. Es realmente impresionante", ha añadido.
Fleming ha asegurado que los jugadores disfrutan además de cómo fluye la acción sobre el espacio. La nueva máquina de Sony, ha indicado, ha permitido al estudio Sucker Punch mostrar con gran detalle las expresiones faciales de los personajes. El videojuego no contará con conexión con dispositivos móviles, si bien será accesible desde la portátil PS Vita. En cuanto a funcionalidades en línea, Fleming ha reconocido que se están estudiando "nuevas experiencias" para el futuro pero no ha querido detallar en qué consistirán.
Tres años ha invertido Sucker Punch en el desarrollo de Infamous: Second Son, uno de los primeros grandes títulos que llega a PS4. "Sentimos una presión parecida a jugar un partido de baloncesto y sólo poder tirar a canasta una vez cada tres años y, claro, no son muchas oportunidades y cada tiro tiene que valer", ha revelado.
PlayStation 4, que lleva vendidas 6 millones de copias, cuenta en su catálogo con grandes franquicias como Call of Duty o Assassin’s Creed, pero no son entregas desarrolladas desde cero para la nueva consola, sino para funcionar también en PlayStation 3 y Xbox 360. Ahora, y con el permiso del futurista Killzone: Shadow Fall -que llegó al mercado a la vez que PS4-, la nueva propuesta de Infamous aterriza para nutrir de acción un catálogo caracterizado por obras alternativas.
