Hoy en día existen muchos centros de formación profesional que dicen estar homologados sin serlo, por eso es imprescindible acudir a las fuentes y listas oficiales del Ministerio de Educación para no caer en engaños.
Estudiar o realizar un curso de FP en un centro homologado presenta muchas ventajas respecto a hacer lo mismo en un centro que no lo está. El objetivo último de realizar una formación es que tenga validez y sirva para acceder al mundo laboral, tanto en el sector público o privado. Aunque es evidente que el saber no ocupa lugar, sí que ocupa tiempo y requiere de una inversión económica, por lo que es importante invertirlo de forma adecuada.
Por ello, es recomendable estudiar una titulación en un centro educativo homologado. Pero, ¿cómo podemos saber si un centro de formación es oficial?
Hoy en día hay encontramos mucho intrusismo en este sector; existen centros y plataformas web que utilizan terminología engañosa para dotar a sus cursos de un carácter oficial que en realidad no tienen.
¿Por qué estudiar un curso de FP oficial?
Realizar una formación en un centro homologado, reglado o autorizado por una determinada Comunidad Autónoma significa que los cursos que imparte son oficiales y, por lo tanto, los títulos emitidos serán válidos en todo el territorio nacional español. Es decir, aunque lo hayamos cursado en Aragón o en Murcia, tendrá validez en Galicia, Madrid o Cantabria.
Se trata de un sistema muy útil que favorece la movilidad entre comunidades y facilita la inserción laboral, ya que no se limita el radio de búsqueda de empleo a la propia Comunidad Autónoma.
El Ministerio de Educación proporciona una lista de centros homologados para facilitar el proceso de búsqueda, ya que en ocasiones no podemos fiarnos al cien por cien de lo que afirma una web. Internet es una herramienta muy valiosa y enriquecedora, pero también es un mar tan grande en el que, si no sabemos navegar adecuadamente, podemos perdernos.
Algunos portales afirman ser oficiales, pero la realidad sale a la luz a la hora de expedir el título. Podríamos decir que ocurre como con los alimentos de los supermercados: hasta que se regularon los criterios para poder poner la etiqueta "bio" a un producto, muchas marcas la estampaban a la ligera en sus productos, prometiendo un contenido que poco o nada tenía que ver con lo que realmente ofrecían.
Además, contar con una titulación de un curso oficial respalda que hayamos cumplido un programa formativo completo, avalado por los estándares de calidad que establecen las Comunidades Autónomas, y cuyo contenido se ajusta a los requisitos de la actual demanda laboral.
¿Qué tipos de centros homologados o autorizados hay?
Existen tres tipos de centros homologados: los públicos, los concertados y los privados.
Centros públicos: Los centros públicos tienen unos plazos de admisión que están definidos por cada Comunidad Autónoma, y aunque son similares en todas ellas, las fechas exactas suelen variar. La admisión para este tipo de centros se regula mediante una nota de corte ya que hay un número de plazas limitadas y mucha demanda.
Centros concertados: A medio camino entre los públicos y los privados, los centros concertados tienen los mismos criterios de matrícula y admisión que los centros públicos. Todo lo enumerado en el punto anterior se cumple también aquí.
Centros privados: En los centros privados no existe ese tipo de criterio en el proceso de admisión, cada centro puede establecer sus propios criterios de admisión. Uno de ellos es que, en lugar de haber nota de corte, pueden adjudicarse las plazas por orden de matriculación hasta que se terminen las disponibles. En cuanto al periodo de matriculación, este no es determinado por la Comunidad Autónoma, sino que lo establecen los propios centros privados. Por eso el plazo para inscribirse puede estar abierto hasta que comience el curso o incluso hasta finales del mes de octubre.
En estos últimos se encuentra Formacciona, centro de formación profesional homologado por el Gobierno de Aragón, que dispone de una amplia variedad de cursos oficiales del área de sanidad y deporte, en modalidad presencial en sus instalaciones de Zaragoza, y a distancia (online) para cubrir la demanda nacional.
En resumen, independientemente de lo que dure una formación, es fundamental elegirla pensando en obtener el máximo provecho y rendimiento posible. Por eso, es importante asegurarse de que el centro en el que vamos a realizarla sea homologado o autorizado. Así, el título obtenido servirá para cualquier parte del territorio español, y no tendremos que sumar preocupaciones añadidas a la emocionante, pero a veces difícil, búsqueda de empleo. Cuanto mejor sea la formación y cuantas más garantías tenga el centro en que la llevemos a cabo, mayor y mejor será después la inserción o reinserción en el mercado laboral.