La primera presentación en el nuevo auditorio Steve Jobs de la nueva sede Apple Park –cuya aprobación por parte del ayuntamiento logró el propio Jobs en su última aparición pública– ha comenzado con un sentido homenaje al fundador de Apple. Y ha continuado de la misma manera, cuando Tim Cook ha pronunciado la emblemática frase "one more thing" para anunciar el iPhone X. Pero Jobs contaba siempre con el efecto sorpresa, y lo cierto es que nada de lo anunciado este martes ha sorprendido a quienes han estado atentos a los rumores.
El nuevo teléfono estrella de Apple es mucho más caro, con la versión básica de 64GB costando 1.159 euros y la de 256GB alcanzará los 1.329 en colores plata y gris espacial. Saldrá a la venta el 3 de noviembre, confirmando los problemas de producción que se rumoreaba estaba teniendo Apple con un teléfono especialmente difícil de fabricar. Cuenta con una pantalla que han denominado Super Retina de 5,8 pulgadas y 458 puntos por pulgada. Emplea tecnología OLED y está recortada según necesidades técnicas y de diseño: las esquinas redondeadas y un hueco en la parte superior central para colocar cámaras y sensores frontales. Apple afirma que es compatible con los estándares Dolby Vision y HDR10, lo que sorprende porque requieren de pantallas con un brillo muy superior al que suelen tener los móviles.
El botón de inicio se ha sustituido inspirándose en los móviles Android. Así, la funcionalidad del clic normal la lograremos deslizando el dedo desde el borde inferior hacia arriba. En lugar del doble clic para que salga Siri se puede usar la voz o el botón lateral. Y para desbloquear tenemos el reconocimiento facial, que Apple ha llamado, en un alarde de originalidad, FaceID. El sistema hace un modelo 3D de la cara y emplea redes neuronales para lograr un doble objetivo: que nos siga reconocimiento aunque nos pongamos barba, nos crezca la barba o cambiemos de peinado y que no sea fácil de engañar. Aseguran haber empleado máscaras como las creadas para las películas del vecino Hollywood para asegurarse que ni con esas. Según sus cálculos habría una posibilidad entre un millón de que la cara de otra persona pueda desbloquear nuestro teléfono.
El reconocimiento facial también permite algunas características algo menos serias como son los animojis: los clásicos emojis de los móviles pero que podremos personalizar con las expresiones de nuestra propia cara en la aplicación de mensajería de Apple. Incluso podremos grabar pequeños vídeos hablando y poniendo gestos y enviarlos a nuestros amigos en una conversación.
También incorpora la recarga inalámbrica según el estándar Qi que la industria lleva utilizando desde hace unos años. Pero extendiendo el estándar, Apple ha presentado también su propio cargador AirPower que permite recargar hasta tres dispositivos de la compañía al mismo tiempo, porque sus nuevos relojes y los auriculares AirPods también incluyen esta tecnología.
La doble cámara cuenta con doble estabilizador de imagen e incorpora una mejora sensible al Modo Retrato que se inauguró con el iPhone 7 Plus, y es la posibilidad de cambiar la iluminación de la persona a la que estemos fotografiando. Así, además de difuminar el fondo como ya hacen otros móviles podremos incorporarle en tiempo real iluminación de estudio de fotografía o muchas otras opciones. Además, los nuevos sensores y cámaras necesarios para FaceID hacen posible que también podamos hacerlo con los selfies.
Los iPhone 8 y 8 Plus
No incorporan tantas novedades respecto a sus predecesores pero mantienen el precio habitual en los nuevos iPhone, de modo que los podremos tener en colores plata, oro y gris espacial desde 809€ el modelo más pequeño y con 64GB de almacenamiento hasta 1.089€ el Plus con 256GB. Incluye carga inalámbrica y cambia el diseño, con la parte trasera en cristal. Comparte con su hermano mayor el nuevo procesador de la compañía, el A11 Bionic, que dispone de CPU de seis núcleos y GPU (procesador gráfico) de otros tres núcleos.
En cuanto a las cámaras, el iPhone 8 Plus dispone del nuevo Modo Retrato, pero no lo incorpora en la cámara delantera. Y como el año pasado, el iPhone 8 no incluye dos cámaras y por tanto no es compatible con esa característica. Apple ha destacado mucho las características de realidad aumentada del móvil con aplicaciones que permitirían mostrar estadísticas de los jugadores del partido que estamos viendo al señalarlos con la cámara o informarnos sobre las estrellas que hay en el firmamento.
Apple TV 4K y Apple Watch Series 3
Además de la renovación del iPhone en el décimo aniversario de que se pusiera el primero a la venta, Apple también ha anunciado cambios en otros dos productos menores. El nuevo Apple TV 4K obviamente reproduce vídeo en esa resolución, pero también acepta el estándar Dolby Vision, que es el que emplean la mayoría de servicios de streaming para mostrar imágenes en HDR.
Además, se vuelve a renovar el reloj Apple Watch con el soporte de recarga inalámbrica y, sobre todo, conectividad móvil sin necesidad de llevar el teléfono con nosotros. Podremos recibir llamadas, además de poder conectarnos a Apple Music y escuchar la música con los auriculares inalámbricos de Apple. Para ello emplea la nueva tecnología eSIM, que es un pequeño chip que está incorporado en el reloj y no hay que cambiarlo cuando se cambia de operador, de modo que tampoco necesita bandeja y ocupa muy poco espacio.
Desgraciadamente, eso también implica que sólo podrá emplearse con operadoras que soporten esta tecnología y en principio Apple no ha incluido ninguna española entre las elegidas, de modo que el 22 de septiembre, día en que se lanzarán también los iPhone 8 y el Apple TV, sólo estará disponible en nuestro país el reloj sin conexión móvil.