Seguro que si estás leyendo esto es porque tienes una cuenta abierta en alguna de las principales redes sociales. Pero no te preocupes porque tan sólo eres uno de los 1.650 millones los usuarios registrados en Facebook, o uno de los 600 millones que usan Twitter, o uno de los 400 millones de perfiles activos en Instagram, por nombrar alguna de las redes sociales más famosas.
O tal vez sí que tienes que preocuparte porque tu derecho a la privacidad está en peligro, sobre todo si no tienes activados los ajustes pertinentes en la red social. Es lo que ha demostrado un joven fotógrafo ruso con el proyecto 'Your Face is Big Data'.
Imagina que estás en el metro o por la calle y alguien anónimo te hace una foto con su móvil sin que te des cuenta. Yegor Tsvetkov lo hizo con varias personas anónimas. Gracias a la web FindFace, que ubica las caras de las fotos y las compara con la base de datos del Facebook ruso, Vkontakte, identificó a la gente que había fotografiado y comprobó su información personal, profesión, aficiones, edad y lugar de residencia.
El trabajo de este ruso curioso revela que tu intimidad puede estar en entredicho con tan sólo un click del ratón. Tsvetkov asegura que le resultó relativamente fácil encontrar la información de la gente anónima que había fotografiado y que tuvo un porcentaje de éxito del 70%. De hecho, cuenta que fue más sencillo buscar a las mujeres ya que "suelen exponerse más en las redes sociales y sus retratos están más elaborados y son más nítidos".
En la comparativa de las fotos reales y las de las redes sociales se puede comprobar algo que todos sabemos: que en las aplicaciones que tenemos en nuestro teléfono móvil o tablet colgamos nuestras mejores instantáneas, alejadas del aspecto que tenemos habitualmente en nuestro día a día. "Mi proyecto ilustra claramente el futuro que nos espera si seguimos compartiendo tanta información en internet sobre nosotros mismos como hacemos ahora", sentencia Tsvetkov.