El profesor Rachid Yazami de la Universidad Tecnológica de Nanyang (NTU) en Singapur, ha anunciado el desarrollo de un nuevo sistema de carga para las baterías de ión-litio que podría reducir espectacularmente los tiempos de carga sin poner en peligro su integridad. De hecho, el investigador de origen marroquí afirma que reduciría el riesgo de que las baterías se incendien. Y todo esto sin cambiar esencialmente su estructura; tan sólo bastaría con añadir un chip a la batería y otro al móvil.
Yazami asegura que empresas como Sony o Samsung ya han mostrado interés por la tecnología, y que tiene intención de presentársela al fabricante de coches eléctricos Tesla. "Mi visión para el futuro es que toda las baterías lleven este chip", asegura. Después de cinco años de investigación, espera que a finales del año que viene pueda estar disponible para los fabricantes.
Actualmente, las baterías de ión litio se cargan a una velocidad relativamente lenta para prevenir el sobrecalentamiento, que puede dañarlas y reducir su vida útil, y en los casos más extremos que se quemen. Pero esa velocidad es siempre la misma. El chip de Yamazi puede establecer con precisión la carga que queda en una batería a partir de la temperatura y el voltaje. Según el investigador, esto permite evaluar el estado de la batería y suministrarle la mayor carga posible en cada momento, lo que permitiría tenerlas al 70% en dos minutos y recargarlas completamente en diez.