El nuevo set top box, que es como se llama a las cajitas que enchufamos a la tele, se ha renovado por completo. Cuenta con un nuevo sistema operativo, tvOS, para el que los desarrolladores podrán crear aplicaciones. Como sucede con watchOS, los programadores podrán usar las mismas herramientas y lenguajes de programación que emplean para las aplicaciones para iOS, pero con las debidas restricciones debido a la naturaleza del dispositivo.
Apple TV puede ser utilizado de dos maneras. La tradicional es con el mando a distancia, pero en este caso no será como los de las televisiones ni como el Apple Remote de toda la vida. El nuevo mando de Apple incorpora una superficie táctil y un botón para llamar a Siri. Además, incluye giroscopio y acelerómetro, lo que permitirá utilizarlo del mismo modo que el mando de la Wii para jugar.
Siri será la segunda forma de controlar Apple TV. Obedecerá a comandos de voz sencillos como "Ver el último episodio de Big Bang Theory" hasta órdenes más complicadas del estilo "Ver el capítulo de Modern Family en el que sale Edward Norton". Durante la reproducción, podremos decirle que no hemos entendido algo y rebobinará quince segundos mostrándonos subtítulos, además de poder decirle si queremos avanzar o retroceder y cuánto.
En un movimiento extrañamente ecuménico para tratarse de Apple, podremos ver estos contenidos no sólo desde iTunes, sino también desde servicios como Netflix, Hulu, HBO o Showtime. Lo cual está muy bien, aunque habrá que ver cuánto se queda por el camino cuando nos llegue en español, ya que ninguno ha aterrizado aún en nuestro país. En cualquier caso, los desarrolladores de Wuaki o Movistar+ siempre podrán crear sus propias aplicaciones para el dispositivo.
Apple TV estará disponible en octubre en Estados Unidos y costará 149 o 199 dólares, dependiendo de si lo queremos con 32 o 64 GB. Una suma bastante más elevada que los 69 que venía costando el actual.