Según cuenta The Verge, la rápida expansión de la ambrosia artemisiifolia, la ambrosía común, permite concluir que para 2050 Europa vivirá una plaga de esta especie. Entre las causas se encuentra la rápida dispersión de las semillas, el cambio climático y el aumento del terreno habitable para esta planta, según un estudio publicado en Nature Climate Change, que ha analizado datos del periodo comprendido entre 1986 y 2005 para crear modelos matemáticos que predigan su comportamiento hasta 2050.
Mayores cantidades de CO2 en la atmósfera y un clima cada vez más seco mejorarán la dispersión de su polen, cuya concentración aumentaría en el centro de Europa, norte de Francia y el sur de Inglaterra, donde hasta ahora es baja, por cuatro, mientras que en zonas donde ya está extendida, como España, por dos. El norte de Italia, Ucrania y los Balcanes verán cómo la concentración de polen aumente de 13.000 granos por metro cúbico hasta los 22.000. Hay que recordar que la cantidad estimada de polen necesaria para afectar a personas susceptibles a tener alergia es de sólo 2.000.
La ambrosía posee una alta capacidad de adaptación al entorno, lo que dificulta su erradicación. Es muy resistente, ha logrado brotar en lugares donde se había eliminado y sus semillas y polen pueden sobrevivir durante décadas. Además, suele crecer cerca de carreteras, lo que dificulta su extracción.
En 2013, la Unión Europa analizó la rápida expansion de la planta y su efecto en la agricultura y el ser humano, valorando los daños causados en 4.500 millones de euros. Los autores del estudio creen que se debe invertir más dinero y recursos en combatir el avance de esta planta, que comienza a considerarse un problema global.
Uno de los expertos consultados por The Verge, Daniel Chapman, del Centro para la Ecología e Hidrología de Edimburgo, cree que las conclusiones del estudio deben tomarse con cierto cuidado, porque los datos de distribución de las plantas de la ambrosía en Europa son imprecisas y las variables que introducen los autores en sus modelos podrían no ser correctas. Uno de los puntos que no han tenido en cuenta son los cambios observados en la biología de la planta en los últimos años, y la rápida evolución de la planta hace difícil construir un modelo que se ajuste a la realidad de su comportamiento futuro.
De un tiempo a esta parte se ha pronosticado que el calentamiento global provocará un aumento de la prostitución, acabará con los pelirrojos, nos dejará sin chocolate y les quitará a los ingleses su tradicional fish'n'chips.