El gigante informático Apple y cuatro editoriales internacionales –Simon & Schuster, Harper Collins, Hachette y Holtzbrinck– permitirán a distribuidores minoristas como Amazon vender durante dos años libros electrónicos con descuento con el fin de evitar una multa de la Comisión por abuso de posición dominante.
El Ejecutivo comunitario ha convertido este jueves en jurídicamente vinculantes las medidas correctivas ofrecidas por estas compañías para resolver los problemas de competencia detectados por Bruselas y ha detenido el procedimiento sancionador.
No obstante, en caso de incumplimiento, la Comisión podrá imponer una multa de hasta el 10 por ciento de su volumen de negocios sin tener que demostrar una infracción.
"Aunque cada editorial y cada distribuidor de libros electrónicos es libre de elegir la relación comercial que prefiera, cualquier forma de colusión para restringir o eliminar la competencia es simplemente inaceptable", ha dicho el comisario de Competencia, Joaquín Almunia.
"Los compromisos propuestos por Apple y las cuatro editoriales restaurarán las condiciones normales de competencia en este mercado nuevo y cambiante, en beneficio de los compradores y lectores de libros electrónicos", ha agregado.
En diciembre de 2011, el Ejecutivo comunitario lanzó una investigación formal contra Apple y las grandes editoriales por indicios de que habían alcanzado un acuerdo ilegal para limitar la competencia en la venta de libros electrónicos y mantener los precios elevados.
En particular, Bruselas mostró su preocupación por la naturaleza y las cláusulas de los contratos de agencia firmados por las editoriales y los distribuidores para la venta de libros electrónicos, con la ayuda de Apple. A su juicio, este tipo de contratos permite más control de las editoriales sobre los precios minoristas y tienen como objetivo aumentar estos precios o al menos impedir su descenso.
Las cinco empresas ofrecen poner fin a los contratos de agencia existentes y abstenerse de incluir en nuevos contratos la denominada cláusula de nación más favorecida sobre precios durante cinco años.
Además, durante un periodo de dos años, las cuatro editoriales no restringirán, limitarán u obstaculizarán la capacidad del minorista de fijar, modificar o reducir los precios minoristas, o de ofrecer descuentos en el precio o promociones.
La Comisión ha concluido que estos compromisos "son adecuados para restaurar y mantener la competencia en materia de precios para la venta de libros electrónicos". El Ejecutivo comunitario también abrió un procedimiento contra la editorial Penguin y sigue en negociaciones para que esta empresa ofrezca medidas correctivas similares.