Según los datos ofrecidos por el Ministerio de Sanidad, Melilla es en estos momentos la región peor parada en lo que al avance del coronavirus se refiere, ya que cumple los tres requisitos que sirvieron al Gobierno para decretar el estado de alarma en Madrid y lidera dos de ellos. A pesar de que Navarra es la comunidad con la incidencia acumulada más alta, lo cierto es que la ciudad autónoma le pisa los talones con 822 casos por cada 100.000 habitantes y subiendo. Además, Melilla cuenta con un porcentaje de positivos superior al 27%, el más alto de toda España, y una ocupación de UCI por pacientes covid por encima del 40%, una tasa que no alcanza ninguna otra región.
Con todos estos datos bajo el brazo, la preocupación de los médicos es más que evidente: "Es una barbaridad y esto no para". Quien pronuncia estas palabras es Leopoldo Rodríguez del Prado, presidente del Sindicato Médico de Melilla, pero, ante todo, médico de Urgencias del Hospital Comarcal y, por tanto, conocedor de primera mano de la situación que se vive en la ciudad autónoma. "Estamos al límite y, si esto sigue así, la semana que viene estaremos literalmente colapsados", advierte.
Irresponsabilidad y falta de medios
Entre las razones que sitúan a Melilla como la peor región de toda España, Rodríguez del Prado apunta a "la falta de responsabilidad de una buena parte de la población", especialmente de los más jóvenes: "Aquí hay mucha juventud, la edad media de la población es mucho más baja que en la península, y hay mucho más contacto social". Además, el presidente del Sindicato Médico lamenta la "bicefalia" de su sanidad, lo que hace que las decisiones de Salud Pública dependan del Gobierno local, mientras que la capacidad asistencial, que tan en evidencia ha quedado en esta pandemia, sea responsabilidad directa del Ejecutivo de Pedro Sánchez.
En la última semana, el presidente de Melilla, Eduardo de Castro (Cs), ha decretado el cierre total de la hostelería y ya se plantea el confinamiento total, incluido el cierre de puerto y aeropuerto, si los datos no mejoran. Sin embargo, junto a esas medidas, los médicos echan en falta más medios, y eso le compete directamente al ministro Illa. "Faltan camas y faltan médicos —denuncia Rodríguez del Prado—. Le pedimos un plan que permita incrementar los recursos humanos, técnicos y materiales, pero de manera urgente".
Para que nos hagamos una idea de cuál es la situación, el presidente del Sindicato Médico no duda en poner cifras sobre la mesa: "La saturación de la Atención Primaria es tremenda. Tenemos unos cupos de los más altos del país, por encima de los 1.700 pacientes por médico de familia. Además, Melilla es el territorio con menos camas y menos profesionales por cada 1.000 habitantes, y eso incide en nuestra capacidad de atender a la población y de contener el virus".
Un médico ingresado en la UCI
A todo ello, se suma el impacto que el coronavirus está teniendo entre los profesionales de Melilla. Según Rodríguez del Prado, en estos momentos hay cuatro compañeros infectados, uno de ellos en la UCI. Y, aunque se desconoce el origen exacto del contagio, él está convencido de que proviene del propio hospital. "Los aerosoles provocan una sobreexposición, hasta la OMS lo ha reconocido, advierte angustiado. Aguantamos como podemos, pero esto es insufrible".