Mientras que según los datos que ofrece la Comunidad de Madrid la Incidencia Acumulada (IA) de la epidemia de coronavirus ha bajado de 500 por primera vez desde la primera semana de septiembre, el Ministerio de Sanidad la sitúa exactamente 100 puntos por encima, en 591.
No es el primer dato que difiere en la información que ofrecen uno y otro organismo y, de hecho, algunas cifras tan básicas como el número total de infectados o el de camas de hospital ocupadas no coinciden nunca.
Sin embargo, esta nueva desviación se produce en mitad de la polémica política por la imposición de las medidas diseñadas por Sanidad a Madrid y tiene unas características que lo hacen especialmente sorprendente.
Según el propio departamento que dirige Salvador Illa, el Ministerio se limita a reproducir los datos que reciben desde las comunidades autónomas, según la CAM los datos que ellos hacen llegar al ministerio son los mismos que hacen públicos día a día a través de la página web de la Consejería. Y, por supuesto, nadie es capaz de explicar las diferencias.
Montaña rusa de IA
Pero mientras que normalmente los datos de Madrid guardan cierta coherencia, los del Ministerio de Sanidad resultan a veces inexplicables y esto es lo que ha ocurrido en los últimos días con la IA.
El pasado viernes y después de varios días de bajadas sólidas, según los datos del Ministerio, Madrid dejó de ser la comunidad con mayor IA al verse sobrepasada por Navarra, una noticia de la que se hicieron eco bastantes medios.
Sin embargo, sólo cuatro días más tarde y después de que Illa y Simón hubiesen puesto en duda los datos de Madrid, la IA de la región se disparaba según Sanidad, pasando en un solo día de 586 a 710. Una subida estratosférica que se daba tras seis días consecutivos de bajadas y mientras, según los datos de la Consejería de Sanidad, la tendencia se mantenía en un claro descenso y la IA era de 525.
Para justificar este ascenso los datos del Ministerio registraban un extrañísimo aumento de 8.000 casos en los contagios diagnosticados en los últimos 14 días —pasaban de 39.090 a 47.329, aún más raro porque el total de personas infectadas sólo crecía en 5.000—.
Los datos de Illa y Simón se tornan aún más surrealistas este miércoles: la IA de la Comunidad de Madrid registra otro movimiento brusco pero en el sentido opuesto: de 710 vuelve a caer hasta 595. Para ello, de la cifra de casos diagnosticados en las últimas dos semanas han vuelto a desaparecer prácticamente los 8.000 que aparecieron súbitamente el día anterior: de 47.329 pasa a 39.090.
Mientras tanto, si atendemos a los datos que ofrece la administración regional la IA seguiría una trayectoria descendente coherente con los datos de los últimos días y con lo ocurrido este mismo miércoles y, además, bajaba por debajo de 500 por primera vez desde principios de septiembre.
Por supuesto, los datos de la epidemia pueden subir y bajar en días sueltos y, de hecho, lo hacen habitualmente, pero en toda la segunda ola desde mediados de julio no ha habido en ninguna otra autonomía dos movimientos tan bruscos y en direcciones opuestas como estos, lo que junto a la larga trayectoria de manipulación y engaño de Illa y Simón pone las cifras de Sanidad bajo sospecha… una vez más.