La pandemia del coronavirus está azotando con dureza a las residencias de ancianos de toda España pero no todo son malas noticias lo que viene desde ese sector. En la localidad navarra de Estella los trabajadores de una residencia de ancianos tomaron una decisión al comienzo de esta crisis sanitaria que seguramente habrá salvado la vida de sus internos.
En el programa Es la Mañana de Federico de esRadio el director de la residencia de ancianos San Jerónimo de Estella, David Cabrero, ha contado cómo surgió la idea de quedarse a vivir con los internos y cómo es el día a día.
Ha explicado que surgió de "una conversación entre los trabajadores" y que debido a que "hay muy buen rollo entre la plantilla y buen ambiente de trabajo y conviviendo" están llevando bien el confinamiento con los ancianos.
El director de la Residencia San Jerónimo ha criticado el tratamiento de la prensa al sector por "las generalizaciones" y que no se cuentan "cosas positivas porque no son noticia". Ha asegurado que "las residencias lo dan todo" por el cuidado de sus mayores. Uno de los ejemplos es el suyo y el del resto de trabajadores que se quedaron para evitar los contagios de coronavirus entre los residentes.
De los 40 trabajadores que tiene habitualmente la residencia, 15 han sido los que tomaron la decisión de quedarse y que del exterior sólo entran productos farmacéuticos y los del catering. En un principio pensaban en una quincena de encierro y que, aunque "ya han pasado", el director cree que seguirán hasta que termine la pandemia.
Sobre la convivencia ha dicho que "a veces nos da reparo mostrar alegría en esta situación" pero ven "que los residentes se siente arropados y entretenidos". La suerte que tienen es que tienen jardín y "pueden salir" para disfrutar del aire libre. También ha tenido palabras para los familiares de los residentes que "están muy agradecidos" por el trato que les dan. "Para nosotros no hay mejor regalo", ha asegurado.