Desde el primer momento de esta epidemia del coronavirus algunos llamaron la atención sobre los datos de infectados y fallecidos en Cataluña, que resultaban muy bajos en comparación con los de Madrid.
Para muchos era llamativa esta diferencia en una comunidad con mayor población y, como mínimo, igual de expuesta que la madrileña: con fuertes relaciones económicas con el norte de Italia —hasta las restricciones por coronavirus había al menos ocho vuelos diarios entre Barcelona y Milán, los mismos que entre la ciudad italiana y Madrid— y siendo la Ciudad Condal la principal ciudad turística de España tal y como es.
Datos dramáticos en cuatro días
Sin embargo, esa situación relativamente positiva se ha complicado en los últimos días, en los que la incidencia de la epidemia se ha disparado en Cataluña, acercándose peligrosamente a la que está teniendo en Madrid.
Con los dramáticos datos que la Generalidad hizo públicos en la noche de este martes el número de infectados en Cataluña se ha disparado en un 136% en cinco días, pasando de 4.203 en la noche del viernes a 9.937.
Las cifras de muertes todavía son más contundentes: en estos cinco días se han disparado un 323% desde los 122 a los 516 que se notificaron este martes. En dos de los últimos cuatro días el incremento de fallecimientos ha estado por encima del 50%.
La comparación con otras comunidades
El crecimiento de las cifras catalanas de nuevos infectados cada día llama la atención: el sábado al domingo se incrementó en un 25%, del domingo al lunes en un 32% y del lunes al martes en un 26%. En estos tres días en Madrid, aún la comunidad autónoma más azotada por la epidemia, los porcentajes han subido de una forma mucho menor: un 8,7%, un 9% y, en las últimas cifras, un 16%.
Si abrimos el foco otras comunidades autónomas los datos catalanes también están llamativamente por encima: en los tres últimos días el crecimiento en Andalucía ha sido del 13%, el 13,5% y el 21%, este último más alto también como en Madrid, pero netamente por debajo del catalán.
En el País Vasco, que fue una de las autonomías en las que la enfermedad antes se manifestó con fuerza, los porcentajes en los que se ha incrementado el número de infectados han sido del 21% , del 15% y del 12%, también sensiblemente menores que los catalanes.
Aunque los datos de infectados no son completamente concluyentes porque como todo el mundo sabe no se están realizando tantos test como sería necesario y, además, la evolución de la enfermedad varía en cada territorio, los de Madrid o el País Vasco podrían empezar a reflejar cierto efecto de la cuarentena, si bien el último pico en Madrid es un tanto desalentador al respecto.
¿Y qué pasa en Cataluña?
Sin embargo, las cifras en Cataluña describen un crecimiento muy diferente que es difícil explicar. Una posible razón sería que allí no se estuviesen respetando en la misma medida las restricciones del estado de alarma, pero hasta donde sabemos no hay ningún dato en ese sentido.
Otra explicación es la que ya apuntan algunos, sobre todo en las siempre convulsas redes sociales: que están aflorando datos que hasta ahora no se habían hecho públicos porque la Generalidad consideraba que le interesaba mantener su región como un territorio menos afectado mientras exigía al Gobierno central el "cierre" de Cataluña, siempre con la agenda independentista de fondo.
Por el momento es imposible saber qué ocurre realmente, pero de lo que no hay duda es de que, de seguir esta evolución, la situación en Cataluña puede ser muy complicada en los próximos días.