Italia, entre los países con más riesgo de contraer el sarampión, gracias al movimiento anti-vacunas

Italia registró 4.885 casos de sarampión en 2017, lo que supone el 23,3% de las detecciones que se dieron en Europa. Sólo Rumanía tuvo peores datos que Italia. A lo largo del pasado año, en el Viejo Continente los casos de sarampión se dispararon un 400% y causaron 35 muertes. En lo que llevamos de 2018, ya han fallecido cuatro personas por sarampión en Italia. Por eso, la Organización Mundial de la Salud ha señalado sitúa el país mediterráneo como uno de los cinco con mayor riesgo de contagio, junto con Rumanía, Afganistán, Pakistán y Nigeria.

Este repunte se debe a la creciente ola del movimiento anti-vacunas. El año pasado en Italia se pusieron de moda las "fiestas del sarampión". A través de Facebook se organizaban quedadas para que los niños se expusieran a la enfermedad y quedar así inmunizados de forma natural. Finalmente, la red social se vio obligada a cancelar estas páginas.

La anterior ministra de Sanidad, Beatrice Lorenzin, aprobó una ley a través de la cual convirtió en obligatorias 10 vacunas para los niños en los colegios públicos -se debía presentar una cartilla certificando las vacunas para escolarizarse-. Esta medida se aplicó para intentar poner freno a los contagios de sarampión y otras enfermedades. Sin embargo, con la llegada al poder de los populistas de la Liga y el Movimiento Cinco Estrellas, el Ministerio de Sanidad ha caído en manos de Giulia Grillo, que está en contra de las vacunas. De hecho, el nuevo Ejecutivo aseguró que ya no haría falta presentar en las escuelas la cartilla que confirmase que los niños estaban vacunados. Es decir, una de las reformas que Italia baraja es levantar la obligatoriedad de vacunar a los más pequeños en plena oleada de contagios por sarampión.

Lo más preocupante es que cuatro de cada diez niños que se contagiaron de sarampión tuvieron que ser hospitalizados debido al riesgo para su salud. Además, el 89% de los infectados se contagió por no estar vacunado. Sólo un 6% había recibido una primera dosis de la vacuna. Según la OMS, las vacunas contra el sarampión ayudan a salvar 200 millones de vidas.

Violencia contra las vacunas

El movimiento anti-vacunas está tomando un cariz violento en el país transalpino. Una de las mejores muestras de esto es lo vivido recientemente por el atleta Ivan Zaytsev, jugador de la selección de Voleibol del país. El deportista subió una imagen de su hija pequeña a Instagram contando que acababa de ser vacunada. Rápidamente, los radicales anti-vacunas inundaron su cuenta de mensajes en los que se podía leer cosas como que estaba recibiendo dinero de alguna farmacéutica por apoyar la vacunación e incluso desearon que su hija sufriera alguna enfermedad en el futuro causada por haber sido vacunada. Aunque Zaytsev no denunció, la Policía italiana está revisando los mensajes para actuar.

Roberto Burioni, profesor de Microbiología y Virología en la Universidad Vita-Salute San Raffaele de Milán, aseguró que, "desgraciadamente, es un hecho que Italia tiene una cobertura contra el sarampión similar a la de Namibia. Así que, objetivamente, los que vienen a nuestro país están en riesgo de contraer el sarampión".

El movimiento anti-vacunas defiende que enfermedades como el autismo o incluso el cáncer podrían ser causados por las vacunas que los niños reciben desde su nacimiento hasta la adolescencia, una teoría que la Organización Mundial de la Salud ya ha negado en varias ocasiones. Lo que es un hecho es que en Reino Unido el número de casos de sarampión se ha multiplicado por cinco y que Europa podría enfrentarse a una crisis sanitaria si este tipo de movimientos se propagan.