“SIN MIRAR LAS CONSECUENCIAS, ALEMANIA HA HECHO MUCHO DAÑO A ESPAÑA ALGUIEN DEBE RESPONDER”
Según hemos leído en “Libertad Digital” la vocera alemana hizo saltar la alarma, provocando un daño incalculable, a nuestra huerta, cuyo protagonismo hizo saltar la alarma. Creo que una persona que asume responsabilidades de gobierno debe tener dotes de serenidad y contrastar antes de poner en duda la confianza de unos productos que son de procedencia, de un país miembro de la Comunidad Europea. Esta celosa Consejera de Sanidad de la Ciudad de Hamburgo, no dudo de acusar con el brote de la bacteria E. Colis, podía tener su origen en una partida de pepinos españoles y comercializada en el mercado central de Hamburgo. Es un deber el cumplir las pautas en temas sanitarios, cuando el consumidor final son las personas. Pero de eso a crear falsas alarmas, debe responder de ello, cuando el daño está hecho porque a través de los medios de comunicación son rápidamente propagados.
Esperamos que aunque tarde el Gobierno, exija una respuesta política y económica a las Autoridades de Alemania, son muchas las familias afectadas en las zonas productoras que ven que sus productos ya no tienen salida, por culpa de esa falsa alarma pero ese exceso de celo, de la titular de Sanidad, contrasta con la apatía e inmovilismo, mostrado por Z.P. y todo su equipo de gobierno. Que esperan que el tono de voz crezca en la calle, antes que cortar de parar una noticia falsa. Ellos están más pendientes de ver como esprinta Rubalcaba, que los problemas reales de los españoles; por tanto no hay razones objetivas para que el actual Gobierno, guarde tanto silencio en lugar de dar la talla, como es su deber.
Pero aquí todo el mundo se pasa la bola, nadie asume su responsabilidad; mientras tanto España se desangra y nadie lo remedia. Nuestro peso como Nación es historia del pasado, todos los países nos toman, a broma pues no pocas veces le provocamos risa como consecuencia de este desgobierno. Hemos perdido toda credibilidad de pueblo serio y responsable y ahora nos toca recoger las tempestades de esos malos vientos que pusimos en circulación los españoles.
Alemania acusó a España, sin tener ni idea de cuál era el origen de la bacteria de los pepinos. ¿Acaso hay otras consecuencias? Hoy desconocemos si hay otros intereses ocultos. De todas formas el daño está hecho a los productos españoles. ¿Dónde está la Trini? Ni se le ve ni se le escucha; ella debía decir algo, como Ministra de asuntos Exteriores de España, tenía que haber iniciado ante la Embajada de Alemania esa demanda de responsabilidades, a la Canciller. No se puede ni se debe consentir estos desatinos, cuando está en juego tantos miles de puestos de trabajo de un potencial económico bastante importante de nuestra economía, que de forma precaria remamos contra viento y marea.
Los productos perecederos de estos agricultores, han sido acusados, de no aptos para el consumo, como consecuencia de esa voz de alarma que de forma irresponsable se ha producido en Alemania. Debíamos ahora los españoles negarnos a consumir sus productos, la suerte para ellos que todo lo traen enlatado, pero así y todo sentirían el efecto tan negativo. Todo es cuestión de autoestima y orgullo español, nunca debemos de someternos a esos países que se tienen por más poderosos. Siempre creí, que el pueblo alemán era modelo a seguir, por su tenacidad colectiva, a la hora de sacrificarse, para superar las dificultades, en defensa de unos valores, de “Libertad” Justicia y convivencia, como países miembros de esta integración llamada Europa; pero si entre nosotros no nos respetamos y no somos solidarios ¿de que nos sirve la Unión Europea? Desgraciadamente por mucho que nos pese debemos los españoles reconocer, que la “Bacteria” hace siete años ya campa sin control alguno destruyendo todo lo que toca, ese es su objetivo su odio venganza y rencor; hacer desaparecer de España sus valores y su sentir como pueblo. Por lo cual queda demostrado una vez más que tenemos aquello que nos merecemos; pues no escarmentamos y como borregos seguimos la voz del amo.
No son mis intenciones terminar sin acordarme de la “Pajina” Si es esa de las Miembras que en el Congreso de los Diputados bosteza y duerme de las interminables noches de juergas, es la ministra de las prohibiciones. Si mujer anímate y márcate un farol de los tuyos, ya verás como animas el cotarro, hace tiempo no se te oye y por lo menos debías justificar el sueldecito, de esa pasta gansa que os embucháis sin decir, ni hacer nada. Al igual que esa otra advenediza, al zapaterismo o al chavismo, que la hicieron responsable de esa sucursal de Bruselas en España lo que ayer fue Ministerio de Agricultura; a este paso nos quitan hasta San Isidro, como Patrón de agricultores y ganaderos. Hay Rosa Aguilar, ayer defensora de los obreros y jornaleros; hoy metida en medio de ese nido de reptiles, de los despidos masivos, con “sus eres” y otras ocurrencias que como suma total nos arroja la escalofriante cifra de cinco millones de parados, que matan las esperanzas de futuro. Todo por ese egoísmo o miedo que atesoran la familia socialista; que os esforzáis a toda costa dilatar el tiempo, para así borrar cuantas huellas sean posibles de la nefasta gestión de Z.P.
Águila.1-6-2011.
Vamos a dejarnos de cachondeo y darle fuerte al mazo, ¿qué productos nos venden en España los alemanes?
¿Qué empresa alemana opera en España?
¿Una cadena de supermercados, de la que por ahora no digo el nombre, que me parece que es alemana...?
¿Me pueden ilustrar sobre esto?
Los alemanes prohibieron el PEPIÑO, pero como la Ñ no existe en alemán ha dado lugar a esta triste confusion
Alemania debe 200 millones de euros a los agricultores españoles A qué espera Rosa de Lancaster para reclamárselos?
Lo primero decir que se han portado como unos hijos de puta...
Lo segundo que el Gobierno y su inutilidad hacen que seamos el culo de Europa y en breve, del mundo.
Esto es lo que ha traído la política exterior de esta basura de gobierno.
Por el gesto de la señora germana parece que alguna vez ha tenido un problema con algún "pepino" español.
Así que nuestros queridos ineptos dirigentes de la UE, los mismos alemanes y franceses que quieren controlar Grecia, comienzan con su nueva fase.
Pues si se creen que con unos pepinos van a machacarnos, van dados.
Y si no que se lo digan a los 50.000 griegos que en estos momentos rodean el Congreso. Hay hasta una cámara en directo por internet.
¡Eso es lo que hay que hacer aquí, antes de que sea demasiado tarde!. Rodear el congreso y la moncloa, y exigir explicaciones a nuestros dirigentes.
Es el respeto que se nos tiene en el Exterior.
Hay que poner en cuarentena a los coches alemanes, las salchichas alemanas,los productos alemanes en general...pueden estar infectados.
y que hacemos ahora con esta hamburguesa de zorra?