El primer ministro del Reino Unido, David Cameron, ha asegurado que en caso de ganar las elecciones del próximo mes de mayo dará a los servicios secretos más competencias para espiar las comunicaciones privadas a fin de prevenir el terrorismo.
"¿Queremos permitir en nuestro país que no se puedan leer las comunicaciones entre personas incluso en situaciones extremas con la firma y la garantía del ministro del Interior?", se ha preguntado retóricamente en un acto en Nottingham, citado por los medios británicos. Tras responderse a sí mismo que "no", ha asegurado que "el primer deber de cualquier Gobierno es proteger al país y a los ciudadanos".
Los atentados de la semana pasada en París "han demostrado una vez más la escala de la amenaza terrorista que afrontamos y la necesidad de que las agencias de seguridad e inteligencia y la Policía tengan fuertes competencias para mantener a nuestra gente a salvo", opinó. "Me siento cómodo con que las competencias que creo que necesitamos, sean en información sobre comunicaciones o en su contenido, son absolutamente adecuadas en una democracia moderna y liberal", aseveró.
La nueva norma obligaría a los servicios de comunicación a ceder a las autoridades las comunicaciones de sus usuarios y bloquearía a aquellas que por el uso del cifrado no pudieran atender a estos requerimientos. Después de que el exanalista de la agencia de seguridad estadounidense NSA Edward Snowden revelara programas secretos de espionaje masivo de los Gobiernos británico y de EEUU, servicios como Whatsapp, Telegram o iMessage han decidido cifrar todas las comunicaciones entre sus usuarios para impedir que los ciudadanos vean violada su intimidad, empleando una tecnología que impide que las mismas empresas puedan acceder a ellas. Todos los gigantes de internet han decidido moverse en esa línea tras la publicidad negativa que han sufrido por las revelaciones.
Hasta ahora, el Gobierno de Cameron no ha conseguido dar a los servicios secretos esas competencias para examinar libremente todas las comunicaciones, por la oposición de organizaciones de defensa de los derechos, la opinión pública y los liberaldemócratas, sus socios en la coalición. "Si soy elegido primer ministro, me aseguraré de que haya una legislación bien completa que garantice que no permitimos a los terroristas tener un espacio seguro para comunicarse entre ellos", manifestó Cameron.