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MyTaxi, una alternativa legal a Uber

MyTaxi permite solicitar y abonar el servicio de taxi desde el teléfono móvil. Además, permite de elegir al taxista que desean.

MyTaxi permite solicitar y abonar el servicio de taxi desde el teléfono móvil. Además, permite de elegir al taxista que desean.
La aplicación permite llamar a un taxi y puntar a los taxistas desde el teléfono. | MyTaxi

MyTaxi inició sus operaciones en España en el año 2012 y desde entonces se ha consolidado como una de las principales aplicación para solicitar taxis en el país, con cientos de miles de usuarios, 2.400 taxistas afiliados en Madrid y 1.600 en la capital catalana.

Con esta aplicación, el usuario puede solicitar un taxi de forma sencilla con su terminal, sin la necesidad de llamar a una radioemisora o dar el alto a un vehículo en la calle.

El pasajero, además, puede pagar a través de su smartphone, guardar sus conductores favoritos para futuros pedidos o seguir la llegada del taxi a través de su pantalla, gracias al sistema de geolocalización, entre otros servicios.

Cuota de mercado

Por cada trayecto asignado a través de esta app, el taxista paga una tarifa de 0,99 euros a MyTaxi, compañía que nació en 2009 en Alemania y que actualmente opera también en Suiza, Polonia, Austria y Estados Unidos.

El directivo asegura que los taxistas catalanes y madrileños han acogido con los brazos abiertos a MyTaxi, ya que la aplicación les permite tener un contacto directo con los clientes, sin intermediarios, aumentar su número de reservas y hacer una gestión del tiempo más eficiente.

Comodidad

A los clientes, añade, esta aplicación les aporta más comodidad, pero también una mayor posibilidad de elección, como el taxista que quieren que les transporte o el tipo de vehículo en el que desean viajar.

Para Antonio Cantalapiedra, uno de los mayores logros de MyTaxi es precisamente que mejora la calidad del servicio, ya que los usuarios tienen la posibilidad de evaluar, al llegar al destino, al conductor y el vehículo.

Ante cualquier queja o evaluación negativa, la empresa se pone en contacto con el taxista, al que exigen mantener limpio el vehículo, que no puede tener más de cinco años de antigüedad, una buena presencia y buenos modales.

En caso de incumplimiento de alguno de los requisitos exigidos, MyTaxi se reserva el derecho -que ya ha tenido que aplicar en alguna ocasión- de vetar al taxista.

"Somos una empresa privada que quiere mejorar un servicio público", señala Cantalapiedra, que asegura llevar "un control exhaustivo" de los profesionales asociados, con el fin de evitar el intrusismo y que taxis ilegales utilicen la aplicación.

En España, MyTaxi cuenta con oficinas en Barcelona y Madrid, en las que trabajan una quincena de personas. La compañía espera reforzar la plantilla a medida que aumente también su cuota de mercado y el servicio llegue a nuevos municipios.

España es el segundo mercado en importancia para MyTaxi, por detrás de Alemania, donde el 40% de los taxis (unos 45.000) está conectado a la aplicación, disponible en más de cuarenta ciudades germanas.

El director general de la compañía en España, Antonio Cantalapiedra, explica, en una entrevista con Efe, que MyTaxi tiene ahora una cuota de mercado cercana al 15%, pero que el objetivo es que una cuarta parte de los cerca de 26.500 taxistas de Barcelona y Madrid utilicen la aplicación en 2015, hasta alcanzar los 6.500 afiliados.

Por ahora, esta aplicación sólo funciona en estas dos ciudades, aunque la previsión de MyTaxi es reforzar su presencia en España, creciendo en Barcelona y Madrid y desembarcando en otras localidades.

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