Este martes 8 de julio ha entrado en vigor la ley que impide a las tiendas de internet ofrecer el máximo descuento legal permitido, un 5 por ciento, y prohíbe también los gastos de envío gratuitos, dos de las medidas estrella de Amazon para captar clientes. La norma, aprobada por unanimidad en el Senado francés el pasado 26 de junio, permite deducir ese 5% de la suma del precio del libro y los gastos de envío, pero con el límite de que el envío no sea gratuito.
En consecuencia, Amazon ha decidido poner el menor precio posible a los libros que permite la ley: sin descuentos y con un céntimo extra como gastos de envío. Los clientes de Amazon Prime, por su parte, podrán ahorrarse ese gasto, incluido en su cuota anual.
La ministra de Cultura, Aurélie Filippetti, afirmó tras la aprobación en el Senado que esta medida "es un signo del compromiso de la nación con el libro, de la idea que Francia se hace de su historia y de su futuro". Un compromiso con el libro que lo hará subir de precio, lo que supondrá un descenso en las ventas. Según las cifras del Gobierno de Hollande, internet representa en torno al 17% de los libros de literatura vendidos en Francia, y Amazon vende un 70% de esa fracción, es decir, un 12% del total.
De hecho, antes de que en octubre de 2013 esta norma pasara también por unanimidad la votación en la Asamblea nacional, la ministra afirmó saber que "la gratuidad de los gastos de envío es –hay que decirlo con todas las letras– una estrategia de dumping con el único objetivo de introducirse en el mercado y acceder así a una posición dominante". Sin embargo, no hay noticia de que Filippetti disponga de las cuentas completas de Amazon y los demás vendedores de libros por internet como para saber su estructura de costes y si realmente pierde dinero por cada libro que vende.
"Una vez que se haya conseguido ese objetivo y que la red de librerías independientes haya sido aplastada, aumentarán sus tarifas en las entregas", añadió la ministra socialista. Ni siquiera en Estados Unidos, donde Amazon lleva más tiempo operando y más ha afectado su actividad a las librerías tradicionales, ha tenido lugar ese supuesto aumento en los gastos de envío. Entre otras cosas porque si la compañía norteamericana decidiera tomar esa medida, incentivaría la aparición de nuevos competidores, tanto dentro como fuera de internet.