Según adelanta este jueves El País, Telefónica ha enviado a Vodafone y Orange una proposición por la cual la compañía se comprometería a realizar las adaptaciones necesarias en las infraestructuras de fibra desplegadas en el interior de los edificios (verticales) para permitir a sus rivales su uso a cambio de un importe que refleje el riesgo asumido en la inversión realizada.
Fuentes de Vodafone han recordado que esta propuesta de Telefónica llega después de un largo e infructuoso periodo de negociaciones y tras solicitar, junto con Orange, la mediación de la Comisión del Mercado de Telecomunicaciones (CMT) para obligar a Telefónica a negociar un acuerdo que permitiera que el proceso concluya antes del 1 de junio con un compromiso "recíproco" de acceso a verticales.
El pasado mes de marzo Vodafone y Orange anunciaron un acuerdo para desplegar en España de forma complementaria y coordinada una red de fibra óptica hasta el hogar (FTTH) con el objetivo de llegar, en más de 50 ciudades, a 6 millones de unidades inmobiliarias en los próximos 4 años y medio, con una inversión prevista aproximada de 1.000 millones de euros.
Mientras estos planes se ejecutan y las compañías van desplegando sus infraestructuras, Telefónica tiene ya, según los datos de cierre del ejercicio 2012, más de 2,2 millones de hogares pasados con su red de fibra óptica hasta el domicilio. Además, de acuerdo con las cifras de la CMT, a febrero de 2013, la compañía tenía 362.689 líneas de fibra contratadas, un 97% del total.
Al mismo tiempo, Telefónica firmó un acuerdo el pasado mes de octubre con Jazztel para el despliegue conjunto de fibra que alcanzará los 3 millones de hogares.