Si leemos VAMP podemos interpretar que se refiere a un vampiro, pero en este caso estamos hablando de algo totalmente distinto. Son las siglas en inglés de Plataforma Atmosférica Maniobrable en Venus, que es el nombre que recibe un nuevo modelo de drone inflable y no tripulado con el que se pretende explorar Venus.
La empresa Northrop Grumman es la que está desarrollando el proyecto. La aeronave tendrá 55 metros de longitud, y podrá flotar a una altura de entre 50 y 70 kilómetros sobre la superficie de Venus. A esa altitud se enfrentaría a menos peligros respecto al suelo. El avión se moverá entre las densas nubes de Venus empleando hélices que se alimentarán de energía solar.
VAMP despegará de la Tierra en un cohete a bordo de una nave nodriza, la misma que la transportará a Venus, en donde se desplegará llenando su interior de gas. Se pretende que este modelo de drone esté listo en el año 2021, pero antes tendrá que superar las pruebas de selección que hará la NASA este año.
Los diseñadores de este prototipo sueñan con que su modelo sea el avance de una futura base flotante que sobrevuele los cielos de Venus. Hay que recordar que la NASA ya manifestó en 2014 su intención de crear una flotilla de dirigibles espaciales que sirvan para explorar este planeta.