La NASA ha informado de que, en las últimas semanas, su blog Ask an astrobiologist ha recibido más de 5.000 preguntas que versan sobre la predicción maya del fin del mundo en 2012 y sobre el impacto contra la Tierra del planeta ficticio Nibiru el próximo 21 de diciembre.
El experto que habitualmente participa en este espacio, el astrobiólogo David Morrison, se ha visto obligado a calmar a los usuarios más alarmados y ha escrito un resumen con las respuestas a algunas de las cuestiones más frecuentes que se le han presentado en los últimos días.
Así, el científico ha dejado claro que la profecía de que el supuesto planeta Nibiru se dirige hacia la Tierra proviene de fábulas y poemas sumerios, en los que aparece en realidd como un personaje ficticio.
Morrison ha tenido que lidiar contra internautas que aseguran que la NASA esconde la existencia real de este planeta y que, incluso, ha creado un telescopio en el Polo Sur para estudiarlo. El experto ha desmentido todos estos comentarios y ha especificado que el telescopio que existe en la Antártida no fue construido por la NASA, sino por la National Science Foundation, y que es un radio telescopio, no un instrumento óptico, por lo que no puede tomar imágenes o fotos.
En este sentido, ha apuntado que muchas de las fotos y vídeos que existen de Nibiru en internet, en las que se puede ver un cuerpo cerca del Sol, son imágenes falsas del Sol, causadas por reflejos internos en la lente. Morrison ha indicado que estas manchas se pueden identificar fácilmente por el hecho de que aparecen diametralmente opuestas a la imagen solar real, como si se reflejara a través del centro de la imagen.
La NASA no se ha librado de recibir preguntas sobre si el Gobierno estadounidense podría estar ocultando el fin del mundo tras el impacto del planeta. El científico ha respondido que ningún gobierno ni organización podría controlar a los millones de científicos independientes en todo el mundo ni a la gente que mira el cielo. "Si algo fuera a chocar contra nosotros, cualquiera podría verlo", ha señalado.
En cuanto a la profecía maya del fin del mundo, el experto de la NASA basa sus respuestas en que "se ha hecho una mala interpretación" del calendario tallado por esta civilización.
Según ha precisado, lo que indica este documento es que el día 21, fecha del solsticio de invierno, termina un ciclo. De este modo, ha apuntado que arqueólogos y expertos coinciden en que los antiguos mayas no se referían a ese día como apocalíptico. A su juicio, la mala información se ha extendido como consecuencia de las redes sociales e Internet. Para Morrison, la profecía maya es "solo una fantasía fabricada".
Además de estas cuestiones, el astrobiólogo también se ha enfrentado a preguntas sobre un posible cambio de eje de la Tierra o si el planeta va a acabar siendo alcanzado por una llamarada solar que acabe con la vida.