Las marcas de moda en España pierden 1.700 millones en ventas por las restricciones. Esta semana conocimos los datos de Inditex, Desigual y Mango, para conocer el desplome de 2020. A finales de enero ya lo hizo H&M. Lo que puede dar mucho que pensar de hacia dónde nos dirigimos, porque de dónde venimos, ya lo sabemos.
Y empezando por H&M, la gran noticia es que Intimissimi ya podrá comprarse esta primavera en H&M. Cada vez son más las marcas que establecen este tipo de alianzas. Ya dice que el refrán, si no puedes con tu enemigo únete a él. Y lo cierto es que mal no le viene al gigante sueco, dado que la lencería que venden deja mucho que desear (no diré lo mismo de la ropa deportiva, puesto que creo que para lo que se paga es muy óptima). Ahora bien: el logo de H&M no existirá en las piezas (ni siquiera en la etiqueta) , y, como es de imaginar, las colecciones de lencería seguirán siendo fabricadas por Calzedonia, grupo italiano al que pertenece Intimissimi. Esto pretende prolongarse durante 3 años y estará sólo presente en Europa: España, Portugal, Francia, Alemania, Países Bajos y Reino Unido).
Las grandes incógnitas que se plantean todos los los expertos es cuál es la verdadera motivación de este tipo de colaboraciones. Si abrirse a un nuevo público o si el objetivo es subir la categoría de los productos de H&M. Algunos analistas apuntan a que H&M podría ser una futura plataforma multimarca. Lo que está claro es que lleva ya muchos años siendo pioneros en las fusiones entre low cost con lujo con numerosas ediciones cápsulas vendidas en cuestión de horas.
Por si fuera poco, Desigual y Christian Lacroix celebran 10 años de colaboración con una colección muy especial, ‘Forever’. Este es otro de los hitos de la moda que fusiona alta costura (o reflejos de la misma) con moda de bajo precio. Y es que Lacroix cuando dejó la alta costura en 2009 y se bajó de la pasarela con las botas puestas, le llamó el dueño de Desigual, Thomas Meyer, para animarle a que liderara la dirección creativa de la marca. Estampados florales, tules y mucho morado, el francés reivindica La Provenza en tejidos sostenibles.
Y para rematar, una última polémica es que Mango haya “clonado” unas sandalias de Chanel (Dad Sandals) que cuestan casi 1200 euros y las venden por 40, y una chaqueta de casi 10.000. Con tiras acolchadas, son un esperpento con o sin logo de Chanel las sandalias en cuestión. Fabricadas a partir de algodón reciclado, hay ciertos cambios que podrían permitir que este calzado para verano del gigante catalán no sean acusadas de ‘plagio’ y sólo inspiración. Sobre la chaqueta, más de lo mismo: en tejido tweed, reinventa el clásico de la marca. Nada nuevo todo esto, porque si algo caracteriza a las marcas de low cost es que su fuente de inspiración son las marcas de lujo.