A la hora de decorar y elegir un estilo concreto de decoración, hay que tener muy claras las definiciones para estar convencidos de lo que estamos haciendo y si realmente se va a ajustar a nuestras necesidades y gustos personales. Al fin y al cabo, la decoración debe basarse en esas dos cosas, en la utilidad al usuario que la va a utilizar, y en el gusto estético de éste. En este caso, en Vivir Hogar, continuamos analizando estilos decorativos, como ya hiciéramos con el estilo romántico y con el estilo rústico. Esta vez nos paramos en el estilo industrial para revisar sus principales características y contarte cómo puedes sacarle partido.
La tendencia de decoración industrial proviene de Inglaterra, y se remonta precisamente a la Revolución Industrial que trajo consigo el completo cambio social y la inclusión de un montón de conceptos y materiales que hasta ese momento eran desconocidos. Pero a la hora de aplicarse al diseño, además de poder incorporar cualquier material que te recuerde de forma real a una fábrica, los colores que hay que utilizar son mayoritariamente los relacionados con los metales. Por lo tanto, los tonos grises y cobrizos son los preferidos para poner como bases, y se puede optar por otras combinaciones según el efecto que se desee conseguir.
La decoración industrial en principio parte de la base de que hay poca luz en el espacio que decora, o al menos viene de ese concepto en las fábricas. Es por ello que se utilizan tantas lámparas, las cuales con luz natural se convierten en un objeto de decoración y también en otra manera de disfrutar del ambiente. Por lo tanto, las lámparas de pie, de sobremesa y de techo son imprescindibles en este estilo.
Respecto a los objetos que se pueden utilizar a la hora de ultimar los detalles de un ambiente decorado con estilo industrial, se puede optar por muchas cosas. De hecho, si hay algo positivo en este estilo es lo versátil que resulta. Hay que tener en cuenta que un objeto antiguo, propio de la decoración rústica; y uno moderno, más propio del decorado moderno, pueden casar a la perfección si se cuidan bien los aspectos finales. Así que en ese sentido, prácticamente todo vale en una tendencia que no tiene sentido del tiempo y que se considera a sí misma anacrónica. ¿Qué te parece la decoración con estilo industrial?