Una nueva forma para darle un aspecto más moderno y personal a nuestro dormitorio es dejar al descubierto la pared de la estancia retirando la pintura antigua y el yeso. Esta tendencia ha cogido fuerza en los últimos años, ya que con la sencillez de estos materiales de construcción se pueden decorar espacios de maneras muy originales.
Si estás buscando darle un giro a tu dormitorio o cualquier estancia de tu casa, descubrir la pared original puede ser una buena opción para ti. Los que viven en edificios antiguos están de suerte, ya que los edificios de los años 50 y 60 cuentan con paredes de ladrillo macizo. Algunos más antiguos tendrán también piedra natural.
Esta posibilidad no sólo combina bien con ambientes rústicos o industriales, sino también con algunos más vanguardistas y elegantes. La forma en que decoremos la estancia tiene mucho que ver, así como el tratado que realicemos a posteriori sobre el tabique. Los colores más cálidos como el rojizo del ladrillo pueden aportar una imagen más rústica.
Si los decoramos con pintura neutra como el blanco nos ampliará la sensación de espacio y el cuarto tendrá un aspecto más sobrio, sencillo y elegante. Podemos emplear un esmalte para evitar que el ladrillo absorba humedad y que resista mejor al paso del tiempo o bien podemos pintar con un color que resulte de nuestro gusto y resalte las facetas y tonalidades de nuestra casa.
Para dejar al aire la verdadera personalidad de los muros será necesario el trabajo de obreros y quizás algún decorador que te asesore sobre la zona que más beneficiaría al aspecto en conjunto o cómo combinar los materiales con los muebles de la habitación. Prepara bien todo para que ninguno de tus muebles sufra ningún desperfecto y deja que los profesionales retiren el enyesado y la pintura de la pared.
Por el contrario, si este tipo de decoración te resulta atractiva pero te parece demasiado molesto por la necesidad de obras, además de costoso económicamente, tienes la posibilidad de instalar paneles de imitación. Al contrario de lo que se pudiera pensar son tablones muy realistas porque algunos de ellos incluyen relieve y detalles como diferencias en la tonalidad o desgaste similar al natural.
Lo más positivo del ladrillo visto es que siempre tienes la posibilidad de dar marcha atrás cuando lo desees y hacer que tu pared recupere su aspecto anterior si no te ha gustado el resultado final de la reforma. Sea cuál sea la forma en que decidas introducir esta idea en tu casa, es evidente que aportará mucha fuerza a las estancias donde decidas aplicarla. Anímate a descubrir la verdadera personalidad de tu hogar.