El Tajo de Ronda o esa extraña maravilla que es la sorpresa
Si llegas a Ronda por primera vez es imposible que su famoso Tajo no te deje literalmente sin aliento, por mucho que hayas visto miles de fotos, por mucho que te sepas los datos y las alturas y conozcas el Puente Nuevo llegas, te asomas y te paralizas.
No es por la altura, o no es sólo por la altura; no es por la belleza de las rocas y las casas, asomadas al borde mismo del precipicio o, al menos, no es sólo por eso. Ni siquiera es solamente por la maravilla de ingeniería del puente, tan alto, pero sobre todo con esa impresión grave y pesada, pero no exenta de cierta gracilidad.
En resumen, el Tajo de Ronda es una maravilla de la naturaleza a la que se le han acumulado en imposible abigarramiento varias maravillas humanas, y el resultado final es de esos que impactan y que, por supuesto, resulta imposible olvidar.
Uno llega a él después de haber atravesado la parte más joven de Ronda, anodina como la de cualquier ciudad; después las calles empiezan a cambiar y, sobre todo, vemos que estamos atravesando una zona mucho más interesante. La Plaza de Toros, a nuestra derecha nos anuncia que hemos llegado a la parte vieja y sólo unos metros más allá...
Hay varios puntos desde los que contemplar el Tajo, el primero y más obvio es desde el propio Puente Nuevo y por eso los turistas lo cruzan deteniéndose casi a cada paso y formando un trajín continuo de gente que anda, para, se asoma y echa fotos.
Otro de los observatorios privilegiados es la terraza junto al Parador, que nos deja ver el Puente a la izquierda, las casas pegadas al precipicio y cómo, a la derecha, el paisaje se abre en unos valles hermosos hasta subir de nuevo hacia los picos de la Serranía de Ronda.
Por el contrario, en el mirador que hay justo en el otro lado, junto al Convento de Santo Domingo, desde el que vemos al Tajo doblar a la derecha y como encerrarse en sí mismo hasta el Puente Viejo. Allí se vuelve abrir al campo verde y hermoso que rodea Ronda.
Toda la ciudad, y especialmente en pequeño casco viejo defendido y aislado por el Tajo, es una verdadera maravilla, de las más hermosas de España, pero es este impresionante corte de milenios en la roca lo que la hace excepcional, otro ejemplo de lo hermoso que puede ser que la naturaleza y el hombre trabajen juntos... o hasta que se peleen, que uno no sabe muy bien qué es lo que ha pasado allí.
Probablemente, la próxima vez que visite Ronda seguirá dejándome sin aliento.
Estuve en Ronda hace ya 5 años. Visité la Plaza de toros (es de pago) y los apartaderos de los toros, es interesante. También es vistoso el Parador, al lado, y el mirador interior del puente. También tiene interés la iglesia de la encarnación y la puerta sur de la muralla y un pequeña casa-museo que te cobraban por asomarte al balcón si no recuerdo mal, justo al lado puedes bajar por un camino y ver el viaducto de frente. Saludos
Ronda, la ciudad del gran Pedro Romero y los toreros "machos". Echo en falta la descripción de los conventos en los que, gracias a las monjas, se disfruta de una repostería excepcional, así como de la mano incorrupta de Santa Teresa, en el Convento de la Merced (calle Dr. Fleming). Una ciudad para descubrir una y otra vez. Quiero dejar claro que mi pasión de RONDEÑO no me ciega, eh. Saludos a todos.
Ronda es todo eso y mucho más. Ciudad embrujada, llena de rincones soñados. Felicidades a Libertad digital. Saludos. José María.
Acabo de llegar de alli. La verdad no tengo palabras para expresar el sentimiento quer esperimenté desde lo alto del puente contemplando todo el valle a nis pies desde no se cuanta altura, en fin, una pasada, como la gastronomía de la zona, lo dicho, una pasada.
¡oooooooooooooohhhhhhhhhhhhhhh! ¡Qué fotos! ¡Enhorabuena!
Hola a todos, En primer lugar y como siempre, gracias por leer y por opinar. Sólo un par de líneas para aclarar que habrá al menos otro artículo sobre Ronda en el que hablaremos de todo lo que habéis echado en falta en este, así que no hay que preocuparse. Eso sí, un poquito de paciencia sí que os pido porque no estoy seguro de cuando lo podré publicar. Saludos, Carmelo Jordá
En habitaculo del Tajo de ronda y en la primera foto se ve la reja de un balcon, pues bién ahí celebraron tus padres su boda.